1. POR MIS NALGAS DEJÓ EL VICIO MI HERMANO


    Fecha: 29/08/2019, Categorías: Anal Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Un día como tantos otros lo había hecho, mi madre me mandó salir a buscar a mi hermano, y que si lo veía me lo llevara a la casa. No tardé mucho en hallarlo, estaba en la otra calle en una tienda de la esquina con sus amigotes, yo llevaba puesto un mini vestido de rayón negro con vivos de varios colores. Nomás me vieron los vagos y sentí me arrancaban la ropa para violarme con sus enrojecidos ojos, por una parte eso me horrorizaba y daba algo de miedo, pero por otra parte me agradaba que no me quitaran los ojos de encima. Cuando mi hermano volteó y me vio atravesó la calle y me preguntó qué quería. Yo le dije que nos fuéramos a la casa, y estiré mis manos para tomar las suyas, no estaba muy pasado y me vio de pies a cabeza deteniéndo su mirada momentáneamente en mis muslos morenos y claros, y como que quedó encantado porque no protestó y alcanzó mis manos, en seguida me abrazó del talle oprimiéndome contra él, fue cuando sentí que se me subía más el vestidito y le dije. -No me abraces tan fuerte porque se me alza el vestido y los vagos me van a ver los chones. _¿Apoco traes? Bromeando. _¡pues claro que traigo! _¿A ver de qué color son? Siguió. _Pues adivina. Le dije entreteniéndolo rumbo a nuestra calle. _El rosa con olanes. _¡Hay no! Con este calor. _¡Ah! el bikini de negro de rayitas (rojas, blancas y azules) _No, sigues frío. _Pues dime _¡Ah qué! Adivina. El objetivo era llevarlo a la casa a cómo fuera lugar. _Entonces no me vas a decir cuál traes. _Te digo en la casa. ...
    ... Así le dije mientras abrí la puerta de la casa y entramos. Mi madre estaba a esa hora se fue al mercado, y yo metí a mi hermano a su cuarto. A la hora de acostarlo me dijo muy cariñoso. _Te quiero mucho manita. _Yo también te quiero. _Pero yo te quiero como mujer, me gustas y estás bien buena. _¡Qué! ¡Qué! _Que me gustas como mujer. Y cuando estiró la mano acariciándome la pierna, instintivamente empecé a luchar con él, y entre livianos jaloneos me tiró en su cama, mientras sentía sus manos por mis asentaderas sobre el calzoncito azul celeste de nylón transparente (con un diablito en la parte del pubis)... hasta que por fin me la chispó, y casi hundía sus uñas en mis nalgas buscando con sus dedos mi ano, yo por más que oprimía en culo sentí las toscas dedeadas, como pude me safé y salí casi corriendo sin calzones, él trató de alcanzarme, pero a esa hora tocaron el timbre (era una amiga) y salí abrir. Con esa amiga de la infancia estudié la primaria y secundaria, luego ella entró al CCH y yo a la preparatoria, aunque al terminarla ya no seguí estudiando; pero mi amiga y yo nos seguíamos frecuentando. _Hola. Te notó nerviosa Maribel. _Pues sí, un poco. _Por qué amiga. _Ya sabes, la tensión y los problemas. _Pues dime, desahógate conmigo que de algo ha de servirte. _Eso sí, tienes razón. Y subimos a mi cuarto, donde le platiqué el problema del alcoholismo de mi hermano, y su reciente comportamiento para conmigo. _Ciertamente el alcoholismo y drogadicción son una "enfermedad", pero ...
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