La camarera de piso
Fecha: 12/11/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: afranlecuesta1, Fuente: CuentoRelatos
... no se sabe si eres gorda o flaca, alta o baja… Ella se echó a reír y me dijo que tenía razón que el uniforme era horroroso y el primero que le dieron le estaba enorme y que se tenía que vestir con ropa propia debajo. -La primera vez que me puse el uniforme en mi casa solo llevaba la ropa interior y se me caía de lo grande que me estaba, me sentía desnuda y cuando vine a trabajar me moría de calor ya que llevaba el doble de ropa. Yo solo asimilaba ropa interior y desnuda, y a Verónica ya le quedaba poco tiempo para irse, así que le propuse comer juntos. - Yo me voy a quedar el fin de semana en el hotel, ¿te apetecería comer conmigo? Le dije. Ella me miró y me dijo que ella se traía su comida pero que gracias. -Y donde comes. -En el sótano, allí tenemos la cantina de los trabajadores. -Si quieres en vez de comer en el sótano te puedes venir aquí y comes con vistas al mar, prometo estar vestido si vienes. -Me lo pensaré, pero si estas desnudo tampoco me va a molestar. -No me lo digas dos veces porque ese era mi plan. -Menudo planazo ir a un hotel para estar desnudo y tratar de pillar a pobres e indefensas camareras de piso. Yo le sonreí y le expliqué en qué consistía mi plan, que no quería ser como los viejos que acosaban a las indefensas camareras de piso. Ella se fue a seguir su trabajo a otras habitaciones y yo me quedé con la polla tiesa y la imagen del culo de Verónica moviéndose bajo ese horrible uniforme, así que me fui al baño a cascármela. Cuando terminé me fui a ...
... buscar algo para comer en la habitación, yo sabía que Verónica no iba a venir, pero si sonaba la flauta y aparecía yo no tenía nada para comer. Cuando regresé continué con mi plan de trabajo, es decir me desnudé me puse los auriculares y me tumbé en la cama, y volví a quedarme dormido. Me despertó Verónica que me sacudía la pierna. Me sobresalté y de un bote me senté en la cama y me quité los auriculares. Verónica se sentó en la cama y recorriendo mi cuerpo desnudo con la mirada se echó a reír y me dijo. -Así que no ibas a estar desnudo si venia ¿no? -No me diste seguridad que ibas a venir, y me dijiste que te daba igual si estaba desnudo. ¿Cómo has entrado? Le pregunté. -Es verdad dije eso, y he entrado igual que esta mañana tengo una tarjeta. Yo me levanté de la cama pensando donde había dejado el bañador y como estaba dando vueltas sin sentido me preguntó que qué me pasaba, le dije que estaba buscando lo que me puse por la mañana y me dijo que de eso nada que ya me quedaba desnudo, que ese era mi plan y no debía cambiarlo. -Pero es para que no te sientas incomoda. -No te preocupes recuerda que estoy viendo un cuerpo escultural. -Pero estamos es desigualdad de oportunidades tu estas vestida. -Yo no dije nada de desnudarme. -Bueno y donde quieres comer en la terraza o en la mesa. -Ya que estás desnudo mejor dentro no te vayas a resfriar. Yo me dediqué a preparar la mesa y ella se dirigió a la cocina para calentar su comida y coger un refresco de la nevera y al agacharse volví a ...