VIVENCIAS VII
Fecha: 15/11/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: XCITANTDLC, Fuente: SexoSinTabues
... recorrerse hacia atrás hasta que los demás les reclamaban "¡órale! Recórranse, yo también quiero ver el show" "ya ¡quítense! es para todos, no vaya a ser que se baje la puta y no alcancemos" . Estaba empezando a ponerme nerviosa, me sentía como corderito en medio de lobos hambrientos, aunque también me estaba excitando un poco al ver cómo se ponían. Pedro fingía no darse cuenta de nada y yo no sabía qué hacer para controlar la situación, en eso se subió un tipo que parecía obrero, traía uniforme de overol y cargaba una caja de herramientas, era bastante alto y fornido, tenía cara de pocos amigos como si estuviera enojado, se me quedó viendo en cuanto subió y sin dudarlo se dirigió hacia mí, yo me hice la distraída pero vi cómo se abrió paso hasta quedar de pie junto a mi lado, su mirada la dirigió a mi piernas, se aferró del pasamanos para no caerse y poniendo sus herramientas en el suelo para liberar la otra mano, se empezó a agarrar la verga descaradamente. Yo volteé la mirada hacia la ventana para ver si así se iba pero no dio resultado, cada vez se agarraba su tranca más fuerte y decía cosas como "ve no’más, que ricura, mamacita, ¿cómo puedes vestirte así? eres una puta exquisita" yo no sabía qué hacer, realmente me estaba calentando y mi rajita emanaba líquidos que estaban empapando mi tanguita. Pedro se daba cuenta de todo lo que pasaba y disfrutaba exhibiéndome cómo puta ante todo el mundo. El mecánico empezó a arrimarme un poco más su garrote hasta tocar levemente ...
... mi hombro, intenté quitarme recorriéndome hacia Pedro, pero él recargó su peso en mi obligándome a acercarme aún más a ese tipo. Me di por vencida y dejé que me tocara con su tranca, la cual sentía dura como piedra y cada vez más cerca hasta que finalmente me repegaba con total descaro en mi brazo. Habrán pasado menos de 5 minutos y Pedro me indicó que ya debíamos bajarnos, se levantó y se fue por delante sin importarle lo que pasara conmigo, me levanté y el mecánico me abrazó por la cintura y agarrándome de las nalgas me jaló para darme un beso en la boca, estaba muy caliente y me dejé hacer, sentí como su lengua se metía en mi boca y como me apretaba más contra su verga, también empecé a sentir varias manos que tocaron mis piernas a su entero gusto, incluso algunas las sentía por debajo de mi faldita. Salí como pude recibiendo a lo largo del camino hasta la puerta de atrás del camión, múltiples caricias en todo el cuerpo, cuando me bajé traía la falda arriba de la cintura y mi tanguita desacomodada mostrando mi rajita que estaba ya muy mojada. Me acomodé la ropa o más rápido que pude, nos dirigimos a un edificio de oficinas en dónde, según me dijo, estaba el distribuidor mayoritario de los celulares que nosotros también manejábamos. Llegamos y nos atendió un tal Jorge, era un señor de unos 50 años, muy gordo, calvo y que traía un traje que apenas le cerraba por lo panzón que estaba, nos dijo que tomáramos asiento y sin ninguna discreción se me quedaba viendo a mis piernas ...