MI PRIMERA VEZ CON MI HIJO - Relatos Eróticos

MI PRIMERA VEZ CON MI HIJO

Mi hijo es mi macho, desde aquel fin de semana. La historia que voy a contar es completamente real, aunque me causa un poco de pena y a la vez hace humedecer mis blancas bragas. Mi nombre es Victoria tengo 42 años y tengo un cuerpo que todos los amigos de mi marido dieran lo que fuera por darle una probadita je. No los culpó pues me excita sobremanera hacerlos enloquecer poniéndome mis faldas pequeñitas y shorts super ajustados... Me enloquece ver como les crece su amiguito cuando me miran pasearme frente a ellos con mi culito paradito como diciéndoles penetrenme je. Me gusta usar braguitas super sexys y con encajes casi todas de color rojo, rosado y blanco. Soy blanca mido 1,66 y soy muy pero muy cachonda, pienso en sexo todo el tiempo y mi marido me complace o bueno complacia pues hay alguien que me hace el amor de una forma inigualable, me hace estremecer cuando me mira, me besa, me toca todo mi cuerpo. Es increíble pero esa persona es mi hijo Leo. Leo tiene 16 años mide 1.75 es delgado, blanco, guapo y va en 5to curso de secundaria. Bueno todo comenzó hace poco más de un mes, era un día jueves y mi marido debía salir de viaje por cuestiones laborales, el viaja una vez al mes 3 días seguidos, la los últimos de cada mes pues es el contador de una empresa importante. Entonces como cualquier día le despedimos mi hijo y yo con un fuerte abrazo y deseandole lo mejor. Ese día desayunamos con mi hijo y cada quien salió hacer sus actividades diarias. Ya por la noche regresé a la ...

... casa y noté que Leo ya había llegado pues estaba su mochila en el sillón. Mijo, ya llegué!!! dije- pero no hubo respuesta, caminé hacia mi cuarto y me lleve una sorpresa pues mi hijo salía de él un poco nervioso y sonrojado, pero no le puse mucha atencionna eso. Hola mami, que tal tu día? Muy bien mijo, dejame me pongo más cómoda y conversamos sip. Entre a mi habitación me desvesti y cuando fui a buscar una tanguita para ponermela note que mi cajón estaba un poco desordenado, pensé enseguida en Leo pero no le di mucha importancia. Coji una tanga roja me puse un camisón y bajé a cenar. Merendamos con Leo conversamos de nuestro día y cada quien fue a su habitación. Más tarde fui a desearle las buenas noches y entré en su cuarto. Buenas noches Leo, no me contestó pues ya se había dormido me acerque un poco y vi algo rojo bajo su almohada, inspeccione y cual seria mi sorpresa al ver que era una braga mía... No lo podía creer! De pronto todo encajó, lo que salía de mi habitación, mi cajón revuelto... Oh dios, no se que pensar, salí casi corriendo de ahí. Fui a mi cama me acosté pero no pude dormir esa noche, pase pensando en mi hijo y mi braga je. Al día siguiente estábamos desayunando un poco mas tarde de lo habitual pues era sábado, yo no sabía cómo actuar por lo de mi braga solo lo escuchaba. Me levante a la var los platos, lo hacia cuando sentí que me observaban, no sabía que hacer, al principio sentí miedo pero poco a poco fui sintiéndome un poco excitada. Sentir como mi hijo ...