Cruce los limites de esposa. - Relatos Eróticos

Cruce los limites de esposa.

Soy Nidia de veintiocho años y mi esposo Gabriel, estamos de pasada viviendo con mi hermana Mildred. Mi hermana me conseguia trabajo en una discoteca porque su amiga es la dueña del negocio. Gabriel pegaba el grito en el cielo despues que sabia que iba a trabajar en la dico sirviendo tragos y nada mas. Le dije a Gabriel que pensara de la situacion nuestra donde habia una necesidad de billetes. Gabriel se calmaba, pero no se tragaba el cuento ese de verme trabajando en la disco. Entraba a trabajar a las nueve de la noche para salir a las tres de la madrugada. Gabriel comenzaba a trabajar en una pizzeria. Soy flaca de buena forma y habia estudiado modelaje y sabia como comportarme en el bar de la disco. Note que Gabriel me acariciaba mis piernas y comenzaba a decir algo, pero nunca terminaba de decir lo que queria decir hasta que le hable muy en serio y le pregunté "Que es lo tuyo!?" entonces me contesto como si tuviera miedo a algo "Es que me da miedo que ahi te vayan a coger" me puse a reir y le respondia "Que tu crees que yo camino con la panocha en la mano para brindarsela a todo mundo...no pienses asi de mi". Comencé a trabajar en la disco y me presente a los demas trabajadores y el que hacía e trabajo mayor era un tipo que lo llamaban por Argueta el que preparaba los tragos que iban a las mesas del salon. Yo me quedaba en un extremo del bar donde solo servia tragos a los clientes que ya estaban sentados en la cantina. Argueta desde una vez comenzo a platicar conmigo ...

... como si ya me conocia de años atras y me hizo sentir muy comoda en el ambiente. Mildred y Gabriel llegaban juntos, pero despues de una poca compañia ellos se iban a casa. Argueta me pregunto por Gabriel y le decia la verdad "él es mi marido". Mildred y yo estabamos en la casa y ella me sacaba unos condones y me decia "Toma, uno nunca sabe" de una vez le decia a mi hermana que yo no necesitaba eso "Tomalos hombre...por si acaso, pero tomalos". En la disco se originaba un buen ambiente y miraba a Argueta lo ocupado que estaba cuando le llegaba sus minutos de descanso y salia por el extremo mio de la cantina. Lo vi venir y el camino dentro de la cantina es my estrecho que incline mi cuerpo hacia adelante con cara a los clientes para que él pasara y al pasar por atras mio...incidente u no incidente, Argueta me tomo por la cintura y sentia su berga que pasaba de una nalga a la otra y pasaba diciendome "Compermiso Nidia". era la primera vez que un hombre aparte de mi Gabriel me psaba por atras una berga. Senti que las alarmas de mi cuerpo se alarmaban diciendo que un cuerpo extraño habia pasado el terreno ajeno. Me senti sacudida que no sabia que decir. Pegunte por Argueta y me decian que él en su descanso se iba a tomar un cafe afuera. Argueta regresaba y entraba por el oro extremo de la cantina y me iba hasta donde él para reclamarle lo que habia hecho conmigo...el de haber rozado su berga en mis nalgas. Al verlo a la cara ya no tuve valor de reclamar y pense que solo habia sido un ...