Mi novia, mi cuñado, mi suegra y la tía
Fecha: 23/11/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: RoF, Fuente: CuentoRelatos
... personas allí habían vivido, éramos cuatro, nuestros padres y nosotros, estudiábamos y ayudábamos en los trabajos propios, esto hizo que los dos creciéramos muy unidos, prácticamente inseparables, primero juegos de niños, después en la pubertad nos contábamos nuestras intimidades, los domingos solíamos bajar al pueblo, en el bar había baile, amenizado siempre por el mismo acordeonista. De la propia edad no éramos muchos jóvenes, casi siempre terminaba bailando con mi hermano, al cumplir él, diez y ocho años, empezó a dejarme algún fin de semana sola, iba más lejos, su cuerpo, tenía unas necesidades que en el pueblo no podía satisfacer. Pasaron algunos años, fui creciendo sin que él se diera cuenta, yo siempre era la niña, la hermana pequeña. Un día me vio bailar con un muchacho del pueblo que no me desagradaba, estábamos muy apretaditos y algún beso en los labios se escapó, creo que desde este momento empezó a mirarme como una mujer. Aquel día, camino de casa, hizo un alto en el camino para abrazarme dándome un beso en la mejilla, al rato otro y otro, acabando en los labios, me sorprendió un poco, pero me gusto, decía que había conocido otras muchachas, pero ninguna como yo, me puse muy contenta al oír estas palabras, entonces fui yo la que lo beso en los labios y añadí, "creo que estoy enamorada de ti José", "lo mismo me ocurre a mi Maira". A los pocos días cumplía, diez y ocho años, nuestra forma de celebrarlo era, pasar el día en un pueblo próximo para comprar algún ...
... regalo y una copiosa cena en la casa. El tiempo no acompaño, hacia una semana que estábamos casi aislados por la nieve, por lo que la celebración se remitió únicamente a la cena, dejando los regalos para días mejores. Después de cenar, nuestros padres se fueron a la cama, madrugaban mucho, nosotros quedamos junto al hogar besándonos al calor de brasas. De pronto, José me da una bolsa que tenía escondida, "toma mi regalo, hace días que lo compre". Me hizo mucha ilusión, ya creía no tener ninguno, dentro un paquete cuidadosamente envuelto con un ancho lazo de color rojo, "¿Que es le pregunte?", "¿Porque no me lo has dado en la cena con nuestros padres?", "No Maira creo que es muy personal", lo abrí, dentro unas braguitas muy mini, negras con encajes muy monas y un sujetador, también muy estrecho, "me lo pruebo", Salí corriendo para mi habitación, encima de este conjunto tan sexy me puse un vestido que me venía muy corto, por haber crecido un poco, más corto que una minifalda, le di maquillaje a mi cara y me presente delante de él, "te gusta le dije levantando mi falda", al mismo tiempo que bajaba la cremallera para mostrarle el sujetador. "Estas preciosa, no veo a la chiquilla de mi hermana, veo a una mujer, tápate o no respondo de mis intenciones", no me has contestado te gusta, se levantó, me abrazo por las nalgas debajo del vestido, apretándome fuertemente contra su polla tremendamente tiesa, moviendo su culo como si me follara, yo hice lo mismo, nos mirábamos a los ojos, ...