el mentor y mis hijas - Relatos Eróticos

el mentor y mis hijas

El mentor y mis hijas.- 

Camila le contó con lujos de detalles a Loli  como la cogió el mentor a ella y a madre, como las hizo gozar.  Loli  mayor que Camila, quitó importancia a los comentarios de su hermana pequeña y con poca experiencia.- No debe ser para tanto, Cami, es un vejete. Si lo agarró yo lo dejo seco enseguida.  dijo con aire de sobradora.
Camila la miró con disimulo, su hermana tenía un cuerpazo, unas caderas muy estrechas, cuidadas en el gym, glúteos muy grandes y duros, senos grandes , pero no tan grandes como los de ella y su madre. Su cabello rubio  y sus lentes grandes le daban un aire de intelectual devenida, sin lugar a dudas era atractiva, estaba buena. Ella decía que tenía mucha experiencia con los hombres, y que había pocos que la podían hacer gozar.
Camila insistió en lo gran cogedor que era el Mentor.-  Y sin mucho entusiasmo  Loli dijo bueno tendré que probarlo. Soltó una carcajada.- 
Camila se acercó a su hermana mayor que estaba sentada en el borde de la cama recién hecha, y se recostó sobre su hombro.-  Loli le preguntó- ¿Que anda buscando mi hermana pequeña? Camila no contestó pero le besó  el cuello.
Se desató la pasión entre las hermanas, Camila en un santiamén quedó con las grandes tetas al aire, su hermana las chupaba sin cesar, mientras sentía la mano de la pequeña entre sus piernas acariciando su chocha por debajo de la pollera. Cuando llegaron a la calentura máxima se desnudaron, se besaron, se tocaron, hasta que se chuparon bien ...

... las conchas, y se perdieron en un gran orgasmo fraternal.
Loli, esto lo podemos hacer con el mentor.
Bueno, acepto, arreglá con el viejito.
Pasó una semana, Camila le avisó a Loli que el mentor las esperaba en su casa al otro día por la tarde.- 
Llegaron, las estaba esperando. Las condujo a su escritorio en la planta superior.
Estaba preparado porque Camila algo le había adelantado. También estaba muy impresionado con el aspecto de las hermanas.  A Camila ya la conocía, pero ahora vestida con pollera, una musculosa azul muy justa que resaltaba sus grandes tetas, y unos zapatos con tacos altos que cubrían sus pies pequeños, era otra mujer. Y Loli, un espectáculo, un cuerpo muy bien formado, una cara muy bonita, unas piernas bien constituidas, también de pollera y tacos altos. Unos bombones.
Los primeros momentos fueron de charla, las convidó  con un gin tonic, scones, y se regodeo mirándolas. Ellas sabían que lo habían impactado. Loli pensó, aguantara este vejete?  Lo vamos a liquidar.   El mentor se acercó a Camila, comenzó a acariciarle el cabello, las piernas y acercar sus labios al lóbulo de su pequeña oreja.- La menor se excitó, sintió cosquilleos en su vientre, y su diminuta braga se humedeció. Luego casi sin demora, el mentor le comenzó a acariciar las grandes mamas, las liberó del encierro, comenzó a lamer los pezones, mientras la otra mano entraba entre sus bragas, y acariciaba los labios de su chocha.- Loli, miraba algo asombrada, se dio cuenta que se estaba ...