MI VIDA EN EL SEXO GAY - 12 - Relatos Eróticos

MI VIDA EN EL SEXO GAY - 12

... le contesté, a mirá entonces te gusta meter a tí también me dijo el, si mi teniente es así como usted dice le contesté, ok y que ganaría yo si hago que puedas hacer lo que quieres me dijo el teniente, eso que me dijo me dejó sorprendido pero al mismo tiempo me exito, que le dije, no se pues que es lo que quisiera ganar usted mi teniente, ya te hago un trato recluta, este fin de semana me voy a quedar como oficial de servicio por lo que voy a estar al mando de todo, tu me vas a llevar a tus promociones que te gustan mínimo quiero que lleves a tres, cuatro contigo a mi cuarto, yo le voy a decir al encargado de tu compañía que van a estar los cuatro en mi cuarto todo el día haciendo unos trabajos para mí, que ya te e ordenado a tí que escogas a tres de tus promociones para que vayan a mi cuarto, pero los tres que tienes que escoger, tienen que ser así de lindos como tú me entiendes me dijo el teniente, si lo entiendo mi teniente le contesté, entonces anda y ten listo a los tres para el sábado me dijo y me retire de su oficina.
    No, podía creer lo que me abia dicho el teniente y si era verdad, abia varios de mis promociones que me gustaban, pero lo que me intrigaba era como iba hacer el teniente, para que mis promociones se dejen cachar por mi, si hasta donde los abia visto, todos los que me gustaban eran heteros, solo les gustaban las chicas y abia dos que ya abian penetrado a un gay, por lo que era obvio que son activos, en los dos días hasta el día sábado, estuve ...

... pensando como iba hacer el teniente, por lo que escoji a los tres de mis promociones que más me gustaban y ellos eran, Ramos, un chato de 18 años de piel trigueña lampiño buen cuerpo bien formado unas nalgas grandes y su pinga de 16 cmts, el otro era, Alvarez un colorado un poco más alto que yo, de piel bien blanca y lampiño, su cuerpo bien formado, unas piernas gruesas, nalgas grandes y paradas y su pinga de 17 cmts y bien gruesa que su mano ala justas la cubría, el era el que más me gustaba de todos, el otro era, Fernández de piel trigueña clara, lampiño, de buen cuerpo buenas nalgas y su pinga igual del tamaño de Alvarez, lo que más me gustaba de el era su forma de ser, era bien machito y con asentó de pandillero.
   Llegó, el sábado y como abia ordenado el teniente, los cuatro nos fuimos para su cuarto a las 9 am una vez en el cuarto del teniente, el nos puso a limpiar su cuarto, en una de esas, Alvarez, rompió una luna de la mesa de centro del cuarto, lo que después me enteré que el teniente, abia puesto ésa luna para que uno de nosotros la rompa y así poder sancionar a los cuatro, el teniente se molestó mucho al ver la luna rota, Alvarez se disculpaba como podía, que el iba a pagar la luna, pero el teniente, no le hacía caso en eso él teniente dijo, ahora por culpa de este huevón, los cuatro pagán pato así que los voy a sancionar todo el día hasta que queden medios muertos, los cuatro nos asustamos por lo que dijo el teniente, que nos ordenó que nos saquemos toda la ropa, lo ...