MI VIDA EN EL SEXO GAY - 23 - Relatos Eróticos

MI VIDA EN EL SEXO GAY - 23

Hola, espero que les este gustando mis relatos que son mis experiencias reales que me a pasado a lo largo de mi vida amigos, les debo decir que cuando empecé a tener sexo con los soldados de mi base militar, ya tenía 21 años de edad, como les conté al final de mi anterior relato, después de dos semanas salí a tomar con Juan otro soldado que me gustaba.
   Después, de estar tomando por varias horas, Juan, estaba bien borracho que a las justas podía caminar, por lo que decidí ir con el, ala casa de una familia que era mis amigos, dónde nos dieron un cuarto con dos camas para poder descansar, yo eché a Juan en una cama, por lo borracho que estaba a las justas lo pude echar boca abajo, yo me eche en la otra cama, paso varios minutos y no podía dormir, en eso ví a Juan y me dió ganas de cacharlo, por lo que me levanté, me acerque a el, lo movi para ver si estaba bien dormido, como Juan ni se movió cuando lo movi, empecé acariciar sus nalgas por encima de su pantalón, como no sentía nada, le empecé a desabrochar su pantalón que se lo baje lo más despacio que pude con toda su trusa hasta sus muslos dejando al aire las nalgas de Juan, que al verlas mi pinga se me paro al toque, le empecé acariciar sus nalgas con mis manos, me exito mas al sentir las nalgas, grandes y sueves de Juan, que seguía sin sentir nada, en eso le abrí sus nalgas y pude ver su ano virgen de lo tenía sin nada de pelos que acerque mi cara a ellas y empecé a chupar su ano, igual Juan no sentía nada, le chupé su ...

... ano por varios minutos hasta que se lo deje bien mojado con mi saliva, dejé de chupar su ano y me baje mi pantalón y trusa hasta las rodillas, me eche saliva en mi pinga, con una mano le abrí sus nalgas y con la otra agarrado mi pinga se la puse en la entrada de su ano, que empecé a tratar de meter despacio, en eso su ano sedio un poco y dejó entrar un poco la cabeza de mi pinga, que izo que Juan se despierte, se movió con fuerza, se voltio y me dijo, que haces Daniel, yo no soy cabro porque me quieres meter la pinga, yo le dije, ya pues déjate si ya estaba entrando, queriendo volver a ponerlo boca abajo, el como pudo se sentó y me dijo, no Daniel yo no soy cabro, si quieres yo te cachó a ti, yo sé que a ti te gusta la pinga, como estaba bien exitado y con ganas, le acepté que sea el que me caché a mi, le chupé su pinga hasta que le quedó bien al palo, me eche boca abajo en la cama, Juan se echó encima de mi y empezó a meter su pinga despacio, que me izo doler un poco pero lo aguante, cuando iba más de la mitad de su pinga dentro de mi ano, Juan empezó a sacar y meter rápido, pero no podía meter toda su pinga porque la ropa no dejaba, en eso él me dijo que me saque toda mi ropa, pero yo le dije que no así domas porque estábamos en una casa ajena, el me izo casó y empujó otra vez con fuerza que me entró un poco más de su pinga y se empezó a mover rápido que paso un poco más de 10 minutos y se vasio dentro de mi, acabo se levantó de mi encima, se acomodó su ropa, yo me levanté ...