A los pies de PILAR - Relatos Eróticos

A los pies de PILAR

... Señora Pilar...Estoy pensando que el castigo te hizo bien. si Señora Pilar, le tuve que decir y ELLA riendo me dijo: Ves, otra vez Señora Pilar... Voy a tener que castigarte más veces, para que te quedes así de servicial.
Yo le dije: Cuando Usted quiera, mi Jefa. Y Pilar, divertida dijo: Hombre...Mi jefa, ya has cambiado de soniquete... Ya era hora.
Yo le dije: Me gustaría poder llamarle: Ama, Dueña, Diosa, Sublime Majestad, Excelentísima Reina, cosas a si, pero desgraciadamente soy su esclava, Distinguida Alteza Pilar.
ELLA se quedo unos segundos pensativa y me dijo:  Pero eso lo podemos arreglar enseguida...Y en una servilleta del Bar Restaurante, en tres minutos hizo una especie de contrato, en donde ELLA era mi Ama, Dueña y Señora. Y yo pasaba a ser su esclava Anita.  Me hizo firmar, justo cuando nos servían la comida, y me comentó Pilar: ¿Sabes que ya eres mi esclava ? - Si, 
mi Ama Pilar. y hablando bajito;Pilar me dijo: Pues mi primera orden, ahora como Ama, es que me beses los pies...
Yo le dije, lo haré encantada mi Ama, y seguí comiendo, como si nada...Pilar me dijo: te acabo de ordenar, que me beses los pies...¿Como te lo tengo que decir; chillando ? - Yo me puse roja, y le pregunte: ¿Pero ahora mismo, quiere que le bese los pies ? ¿Aquí, en el ...

... restaurante? y PILAR me dijo: Sí, esclava, aquí y ahora...Me da mucho morbo...
La verdad es que no estaba lleno, ni mucho menos, día 27, lunes, fin de mes...Cuesta de Enero...
Y yo, haciendo, como que se me había caído una servilleta, me agaché como para recogerla y aproveché a besarle a Pilar, los dos pies. Orgullosa volví a sentarme en la mesa. Y Pilar me dijo: recuerda me luego, que te tengo que castigar, por desobediente...
Yo me quedé pasmada, y le dije: Si he besado sus pies, como Usted me ordenó...
Y Pilar, me dijo: Hoy doble castigo. Uno por desobedecer...Y otro por mentir.  Yo no daba crédito a sus palabras...
Le volví a decir: Perdóneme Mi Ama, pero solo he echo, lo que Usted me ordenó. Besar sus pies.
Pilar me dijo: No querida esclava, no has besado mis pies...Lo que tu has besado han sido mis zapatos. Pero mis pies, NO.
por tanto, también me has mentido, pues me has dicho, que has besado mis pies y es mentira...
pero vamos, vete terminando eso, que nos tenemos que ir, y tengo que pensar hoy como castigarte...
Yo empecé a ponerme nerviosa, a rogarle y suplicarle, perdón, por mi falta cometida sin querer...Y Pilar me dijo:
Tranquila,  no te aceleres...Termina de comer...Y luego iremos viendo como te castigo.

1ª PARTE  ( Continuará )

ANA MARIN RODRIGUEZ