Aleida Mini Ninfomanita IX.
Fecha: 29/11/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: sexigaleno, Fuente: SexoSinTabues
... rostro, y pon las manos en tu cintura y te vas dando vuelta muy despacio y caminas hacía la puerta. S. - ¿Así lo hago bien?, ¿no camino feo con estas zapatillas altas? C. - No, lo haces bien, muy bien, ¡pon tus manos atrás de tu cabeza y camina lento hacía mí! S. - ¿Le gustó como me veo don José?, me siento como una de esas chicas del internet, que se desnudan en las cámaras de la web. C. - Pues yo diría que, tú eres más bonita que esas chicas, ya que tú eres menor de edad y esas muchachas ya son de 18 años, para adelante. S. - Bueno si usted dice, me lo voy a creer, ¿Qué música es esa, que está oyendo? C. - ah, es música romántica, para bailar abrazados con alguna pareja, novia, esposa o una amiga, ¿o tú? S. - A que bien, ¡se escucha muy bonita, pero yo no sé bailar eso!, ¿me gustaría aprender a bailar, cómo lo hacen los grandes? C. - Es muy fácil, sólo te debes de dejar llevar al ritmo que tu pareja te imponga y luego es cosa der unas vueltecitas muy despacio, ¿te gustaría aprender cómo se hace? S. - Aja, sí un poquito, ¿a poco usted me enseñaría a bailar? C. - Claro que sí, ¿y así aprovechamos ahora, que estamos solitos?, así nadie nos perturbara, ni el mal tiempo, lo haremos muy bien, juntos, ¿quieres? S. - Bueno, está bien, pero usted me dirige, ¡cómo debo de moverme en eso de la bailada! C. - Es más, para que no te sientas nerviosa, te voy a convidar un poco de vino con sabor a duraznos que tengo en refrigeración, ¡voy por el! S. - Ya, está bien, usted sabe lo que me ...
... da, por mí no hay problema, ¡aquí lo espero! C. - Mira, tómate una copita y yo otra, mientras platícame de ti, ya que te he visto últimamente pensativa, como distraída ¿Qué tienes? S. - Ay don José, sí usted supiera, ya ve que yo huérfana, claro tengo tíos y parientes más lejanos, pero hace cómo un mes, uno de mis primos, que va a la secundaría llegó una noche a donde duermo y se puso a abrazarme y hacerme cosquillas, yo quería que se fuera ya que olía cómo a yerba quemada de su ropa y me daba asco, pero. . . ¿. . . ? C. - A ver, ¡cómo qué pero!, ¿te hizo algo ese primo?, cuéntame sin pena, ¡haber te doy otra copita de vino! S. - Me da pena don José, le tengo confianza y le voy a platicar lo que me hizo, espero usted si me entienda, ya que mis tíos los papás de ¿- - - - - - - -?, dicen que yo tuve la culpa de que el me haya desquintado, ¿qué yo le daba motivos, que era una p. . . ?, bueno usted sabe. C. - Haber mi chiquita, ¡toma aire, respira profundo varias veces!, ahora sí, comienza a contarme, ven siéntate en el reposet y yo aquí y te escucho. S. - Pues vera don José, cómo le había dicho, ese día llegó oloroso a yerba quemada y se metió al cuartito donde duermo y empezó a abrasarme y hacerme cosquillas, yo ya estaba acostada, para dormir y le dije que se fuera, que no me agradaba lo que me hacía y menos porque olía a yerba quemada, y me cruzó una bofetada y se me echo encima de mi cuerpo, y él me jalaba de mi cabello, yo grité para que me ayudaran, pero no había nadie, ya ...