"Mirta, una esposa caliente". - Relatos Eróticos

"Mirta, una esposa caliente".

... ni Mirta ni Juan Carlos aparecen, "algo habrá sucedido?", y me contestó: "Vos no te diste cuenta?: la hermosa concha de tu mujer y la gran verga de mi marido, no estarán complementándose?, a mí me quedó claro como tú mujer le clavó los ojos más de una vez a ese pedazo de pija, que vos no te hayas dado cuenta, es otra cosa, en una de esas con tu mujer el tiene más suerte". Yo, algo curioso le pregunté:"porqué con Mirta tu esposo tendría más suerte?", a lo que contestó que a la mayoría de las mujeres nos llama la atención cuando un hombre es muy bien dorado. A mí, Juan Carlos me hace ver las estrellas y no es para menos: no cualquiera tiene una verga de 22 cmts x 6!!!", yo algo humillado, le contesté, "bueno Claudia, no tendré esas medidas, pero mis 19 cmts buen puesto tengo y, bien traviesa eh!!!. Fue una conversacion tan llamativa que nos olvidamos que del banco no volvían ni Mirta ni mi amigo, hasta que aparece Juan Carlos primero, Mirta no asomaba. Curioso voy en su busca y la encuentro ocupada en la cocina arreglando las cosas. Me ve llegar y me dice: "Hola Amor, todo bien?", le contesto: "Si, vos también?" y me responde abrazándome: "Más que bien!!!, te cuento amor, estoy exitada y espero que me escuches bien como siempre; voy a confesarte que tu amigo me dejó asombrada: en momentos que desde la cocina lo ví entre al baño, no pude evitala curiosidad de ver qué había entrado y no cerró bien la puerta. Demoraba y me entról duda si le pasaba algo. Me arrimé no tanto, pero ...

... pude observar que estaba parado sin orinar, pero sostenía una verga descomunal mi Diossss!!!. A lo que yo contesté: "Y a vos mi amor, te exitó?, digo..., te provocó algo?, porque si es así, podriamos ofrecerles terminar la noche de una manera especial." "Me contestó que si yo no lo tomaba a mal , si le gustaría". "Vamos y lo conversamos los cuatro como adultos, si?". Fuimos y apenas le dijimos si podríamos hablar con ellos, Juan Carlos respondió que "justamente habíamos estado conversando y proponerles hablar de algo también". Tampoco dió mucha vueltas y sin dudar dijo: "Nene, sentaré al lado de Claudia, Mirta, vení conmigo". Claudia me acarició, puso su mejilla con la mía y empezamos a besarnos con gran pasión susurrándome que "estaba esperando este momento, yo sabía que se nos podía dar". En lo mejor de lo mío con Claudia, me doy cuenta que Mirta y Juan Carlos hiban mucho más allá: también cruzaban sus lenguas de una manera caliente, sinó que mientras se besaban, se podía ver cómo Mirta agarraba y pajeaba una verga monstruosa!!!. Se imaginan como me calentó mucho más ver a mi esposo caliente con ese espectáculo hermoso. Claudia no se quedó atrás y sacándose su camisa dejó l descubierto sus tetas hermosas a las que me prendí como loco. Pero siempre elegía mirar a Mirta y Juan Carlos. Me exitaba y adoraba ver ese espectáculo: ver a mi mujer con la pasión que chupaba esa hermosa en pija venosa!!!. Claudia se desabrochó su Jean y dejó al descubierto una hermosa tanga blanca que ...