LOS MUCHACHOS DE MI BARRIO 3
Fecha: 06/07/2020,
Categorías:
Confesiones
Tus Relatos
Autor: Alejandrogusta, Fuente: RelatosEroticos-Gratis
... ¿Me la metió a toda?.
-Hasta los huevos… Lindo culito tenes. Aguantador. Chau… Nos vemos
-Chau, don Manuel…
La vida siguió su curso.
Cada uno de los muchachos del barrio siguió teniendo experiencias de todo tipo.
Si bien no reniego de aquellos años y de lo vivido tengo un recuerdo especial para los moralistas de todas las épocas.
Siempre hubo un adulto rompiéndole el culo a un chico, ya sea un tío, un primo, un hermano, un vecino, un amigo.
Nada cambió.
Es solo que la Sociedad hipócrita sigue negando lo que ella misma genera.
En mis recuerdos hay un impasse desde don Manuel hasta el próximo adulto que se relaciona sexualmente conmigo.
A lo largo de una semana nos reencontramos con los mas chicos: los Omarcitos A y G, el Planeta, el Bolita, el Tato y el Payito.
Con el primero que me encontré fue con el Omarcito G al que el Grillo le había roto el potito y tuvieron que ponerle puntos.
Le pregunté y me contó como fue que el Grillo lo lastimó tanto.
El Omarcito G me dijo que después que nos fuimos los otros chicos se quedó un rato más con el Grillo y volvieron a jugar a las preguntas.
Que el perdió muchas veces y que el Grillo le pincelaba el culito con la chota y que de a poquito algo le entró pero que le dolió y se lo dijo al entrenador…
-Grillo, acá no juguemos más porque puede venir alguno a bañarse y nos van a ver…
-Bueno O. Vení vayamos a los vestuarios a guardar todo y nos vamos.
Una vez que guardaron todo el grillo le dijo que jugaran un ratito mas y que ...
... se irían.
El Omarcito G aceptó y jugaron.
Él perdió y el Grillo lo puso en cuatro sobre una banqueta y le pincelo de nuevo pero ahora le puso vaselina y le metió un dedo en el culito.
Como le dolió le dijo que nada mas…
-Mira, lo juguemos de otra manera. Si perdés, me la tenes que soplar.
No era muy difícil el Omarcito G, además el entrenador era un hombre lindo, bien peludo, de ojos grandes, y muy simpático.
Volvió a perder y sentado en la banqueta en vez de soplar terminó chupándole la chota al Grillo.
Dice que le gustó y que siguió sin que él se lo pida hasta que el hombre le acabó en la boca y se lo hizo tragar.
Esperaron un rato y el Grillo le dijo que si no quería que les cuente a los demás que se la había chupado y tomado la leche que se dejara pincelar el potito.
Una vez que aceptó lo puso boca abajo y con mucha vaselina se la dejo ir de golpe.
El Omarcito G frunció el upite y el Grillo, que de paso portaba una buena chota, se la empujó a la fuerza y lo lastimó.
-Omarcito ¿Te gustó chuparle la chota al Grillo?
-Sí
Esa primera tarde nos quedamos en la esquina el Bolita y yo.
Ya comenzaba a hacerse noche y el Bolita me dijo…
-Tengo unas ganas de hacerme la paja… Me voy a mi casa.
Ah estoy solo hasta el sábado. No hay nadie… ¿Queres venir?
-Dale…
Nos fuimos caminando hasta la casa del Bolita y entramos a su pieza.
Era verdad que quería hacerse la paja porque tan pronto entró se desnudó entero y se tiró en la cama y comenzó a tocarse.
Al verlo recordé ...