La seducción de mamá
Fecha: 11/12/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: Atrevido, Fuente: CuentoRelatos
... siempre andaba tocándome lo que podía, y claro aunque a mí me gustaba, no era bien visto que una se dejara, pero me acuerdo que yo me ponía bien caliente de mi vagina, empezaba a mojarme y a desear más y más que me acariciara... se iba sobre mis tetas, era lo primero donde metía las manos y pues yo no era de piedra, me dejaba acariciar y mis pezones se ponían duros y empezaba a respirar agitadamente, creo que eso calentaba más a tu papá, se nos olvidaba todo, luego de las caricias empezaba a chupármelas y ahí sí ya no podía hacer nada por resistirme, luego sus manos bajaban a mi pantaleta sin darme cuenta o, tal vez con lo caliente que me ponía, ni cuenta me daba cuando ya me estaba acariciando mis vellos, y de eso a meter sus dedos tan solo un instante, me acariciaba tan delicadamente que me derretía en sus brazos y a escurrir mis orgasmos... Al escuchar todo esto, mi verga se fue poniendo dura a más no poder, y como estábamos bailando, la fui apretando contra mi cuerpo y a pegarle lo grueso de mi verga para que la fuera sintiendo, ella como si no se diera cuenta, también se fue pegando más y más a mi sexo, bajé mi mano sobre su espalda y llegue a sus nalgas, esas nalgas que me han traído alucinando, las empecé a acariciar... ella no decía nada y para calentarla más, le pregunté: —Oye mamá y tú no le hacías nada? —Bueno, él tomaba mi mano y la metía en su pantalón para que le acariciara su verga, la primera vez que la toqué, sentí hervir mi sangre y mi cuerpo se puso ...
... caliente, caliente... —Y luego mamá...? —Pues luego, él me levantaba la falda y me ponía su verga en la vagina, yo me moría porque me la metiera, pero como todo era a escondidas y no podíamos estar mucho tiempo sin que supieran donde estábamos, me dejaba toda caliente y ganosa... Metí mi mano en su pecho y le acaricie una teta, ella como que se quiso retirar de mi cuerpo, pero más la apreté hacia mí y empecé a jugar con su pezón que se puso duro... luego le dije al oído... “así te hacia mamá? así te apretaba tu pezón...?... te gusta mamá, te gusta mi caricia...?”. Ella no respondió nada, pero empezó a respirar agitadamente, se abrazó a mí y me besó en la boca, yo reaccione con todas mis ganas, la abracé también y mis manos se fueron a acariciar sus enormes nalgas y mi verga buscando su rajada... Así estuvimos un rato agasajándonos, le empecé a meter mano en su vagina y ella dejándose llevar por lo caliente que ya estábamos los dos, sus vellos son sedosos y muy hermosos, bueno a mí me encantan, mi dedo entraba y salía suavemente de su rajada, que para este momento ya estaba destilando sus jugos calientes, y con ese aroma tan excitante de quien tiene tiempo sin haber cogido... el ambiente se puso enloquecedor... Nos fuimos a la cama, me baje el pantalón y le enseñé mi sexo, le dije: —Mamá te gusta mi verga? —A ver déjame verla bien... Luis, pero si está hermosa, que bárbaro sí que la tienes buena eh?... diciendo esto y se empezó a sonrojar... mi verga como si estuviera modelando, ...