MI MEJOR 31 DE DICIEMBRE CON MI HIJA MENOR
Fecha: 14/12/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: Nandincesto45, Fuente: SexoSinTabues
... veía se puso un dedo en los labios en señal de silencio, Paola agacho la cabeza. A mí con ese sexto sentido que tenemos los padres, me entro una espinita que no pude contener. - Hija, ¿te gustan tus primos? - Jenny si, David no tanto. - ¿Por qué? - Porque es muy brusco para jugar, después hablamos papi, contesto y salio cojeando para el baño. Bueno pasaron esos 4 días y se llego el 31 en medio del agite en la preparación de la fiesta de fin de año, pero Paola amaneció con mucha tos y nada que se le calmaba en el trascurso del día, entonces como a las seis de la tarde empezó a llover. - Mi amor, a la niña no la podemos sacar a la calle con este temporal, le dije a mi esposa. - ¿Entonces que hacemos? Pues váyanse ustedes, yo me quedo con ella, al fin y al cabo la reunión es en casa de tus padres y tu no puedes faltar, yo les felicito el año temprano por que sabes que a las 12 se bloquean todos los teléfonos y me disculpo con ellos. Así quedamos, al rato vinieron a recoger a mi esposa y a mis hijos mayores, los abrase y les di el beso de felicitación y se marcharon. - ¿Quieres comer algo? Le dije a Paola cuando nos quedamos solos. - Si papá, un sándwich. Le prepare uno de lonchas de pavo con mermelada y nos fuimos para mi alcoba a ver tele. Se tendió en la cama bocabajo apoyada en los codos, y admire sus nalguitas solo cubiertas por el calzoncito blanco con dibujos del oso yogui. Me comencé a excitar y pensé que eso no podía ser con mi bebecita, de pronto ella se acomodó ...
... abriendo sus piernitas, tenia el calzón metido en la raja y quedo a mi vista la mitad de su vagina, lógico que sin pelos, tierna, rosadita y un poco gorda, yo hipnotizado no podía quitar la mirada y mi pene se paro con pulsaciones exageradas queriéndose salir de la prisión de mi pantalón de chándal, mil cosas pasaron por mi cabeza, poco a poco el morbo se apodero de mi conciencia, mi respiración se acelero, y me resolví. Solo tuve que estirar mi temblorosa mano para tocar su entrepierna sin saber como reaccionaria ella, no dijo nada ni se movió, solo cuando la subí más y su vagina quedo al alcance de mis dedos y la acaricie, se enderezó como un resorte. - ¿Qué haces papá? - Hija es que tenias el calzoncito metido y te lo estaba acomodando, le dije en tono de disculpa. Ahí mismo miro hacia mi pene y se dio cuenta que lo tenía como un riel, pero se hizo la que no se dio cuenta de nada, y se recostó a mi lado en una almohada estirando las piernas y se tapo con la camiseta larga que usaba como pijama. Yo maquinando como meterle mano sin que ella se enojara, le puse conversación: - Amorcito hace rato que no toses. - Papa, te digo la verdad, es que yo no quería ir a esa fiesta, por eso me hice la enferma. Pasé mi brazo izquierdo por encima de su hombro, y mire sus grandes ojos. - ¿Por que? - Porque estoy enojada con David. Disimuladamente le apreté el pezoncito de su pecho por encima de la blusa, aun no usaba brassier. Se estremeció y me miro interrogativamente, abanicando sus hermosas ...