El juego del parchís
Fecha: 16/12/2017,
Categorías:
Masturbación
Sexo en Grupo
Lesbianas
Autor: aboixbcs, Fuente: xHamster
... atrae. Tengo muy claro que soy heterosexual, pero no es menos cierto que acababa de recibir una de las mejores mamadas que recuerdo, y me las han hecho muy buenas.Cuando Andreu comenzó a chupármela yo estaba tenso e incómodo; mi mente rechazaba aquello y no conseguía disfrutar. Pero al rato decidí relajarme y tomarlo como lo que era: una experiencia nueva, uno más de nuestros juegos. Me concentré únicamente en mi propio placer y me dejé llevar por las sensaciones que estaba experimentando, lo que me permitió gozar de un excelente trabajo oral.Pero entonces, ¿por qué me sentía así? ¿Qué era lo que me preocupaba? Enseguida lo comprendí. Nuestras aventuras apenas estaban empezando, y si Andreu me había hecho semejante homenaje, no es difícil suponer que muy pronto alguien me mandaría a mí corresponderle del mismo modo. Y cuando llegara esa ocasión, que llegaría sin duda, ¿con qué cara iba yo a negarme? De todos modos procuré apartar de mi pensamiento esas preocupaciones, ya decidiría lo que fuese en el momento oportuno. Entretanto, Laura rompió el espeso silencio que reinaba en la habitación:-Joder, tíos, es lo más morboso y salvaje que he visto en los días de mi vida. Me habéis puesto más caliente que un volcán.-Pues no te cuento cómo estoy yo, querida-, dijo Mónica -. Me he mojado hasta los muslos viendo el espectáculo que nos han dado estos chicos. Vamos a seguir jugando, a ver si tengo suerte y consigo que alguien me alivie pronto esta calentura.Así, pues, regresamos al ...
... tablero de parchís para continuar la partida. Sin embargo, a pesar de haber 16 fichas en circulación, transcurrió más de media hora sin que nadie se comiera ninguna. Por fin la suerte cayó de mi lado y le comí una ficha a mi novia. Mi mandato fue el siguiente:-Quiero que le comas la entrepierna a Laura hasta que se corra en tu boca, y luego, si ella no se opone, la besarás durante dos minutos para darle a probar su propia miel.Sabía que estaba jugando con fuego pero realmente me apetecía ver a las chicas en acción y de paso cobrarme una pequeña venganza por la jugada anterior, aunque faltaba por ver si Laura accedía al beso lésbico que les estaba proponiendo. Por el momento ninguna de las dos dijo una palabra, se limitaron a tumbarse sobre el edredón, Laura boca arriba con las piernas muy abiertas y Mónica delante de ella mirando a su coño. A una indicación mía, mi chica se inclinó sobre el sexo de Laura y empezó a darle suaves y delicadas pasadas con la lengua por los alrededores de la vulva. La afortunada se incorporó apoyándose en los codos para observar lo que ocurría entre sus piernas, y por la expresión de su rostro parecía disfrutar mucho con ello. No era para menos, porque Mónica se aplicaba a la faena con gran dedicación.Tras lamerle repetidamente las ingles, el interior de los muslos y el pubis, empezó a pasar la lengua por los labios externos, hasta que consideró que era el momento de atacar sin contemplaciones el objetivo e incrustó su boca en el sexo de su amiga, que ...