Látigo y ositos
Fecha: 18/12/2017,
Categorías:
Dominación
Microrelatos,
Autor: Maria Apunto, Fuente: CuentoRelatos
... se te pone cada vez más dura. Entonces paro un segundo, me la saco y te la sujeto con la mano. Llevo mis dedos a mi interior impregnándomelos y los llevo hasta tu ano, jugando suave, haciendo círculos con ellos. Das un respingo, noto como te tensas, pero no dices nada salvo un —Mmmmmmm Suavemente meto mis dedos en tu ano mientras me vuelvo a meter la polla en la boca relamiéndola entera te lleno de mi saliva, mi boca se mueve y mis dedos van abriéndose paso en tu interior suavemente los saco y sujeto el vibrador con la mano. Lo impregno de lubricante y lo acerco suavemente a tu ano. Notas algo duro rozando tu entrada, doy otro latigazo sobre la cama. Y me agacho de nuevo a lamerte la polla, suavemente te relamo el glande. Gimes, y me pides que siga. Dejo el látigo a un lado y con una mano comienzo a rozarte el ano con el vibrador y con la otra te sujeto la polla fuerte, me la meto en la boca y comienzo a presionarte fuerte con mi boca, notando como te endureces, como saboreo tus primeras ...
... gotas, voy introduciendo poco a poco el vibrador mientras succiono tu polla subiendo con fuerza y relamiendo tu glande. Mis dedos bajan hasta tus huevos acariciándolos suavemente. Comienzo a sacar y meter suavemente el vibrador de tu ano. —Dios! Joder! No pares! Sigue! Ah!!! Te doy intensidad con mi boca, no puedes más, estas a punto, lo noto, mis dedos acariciando tus huevos notan como se encogen como estás a punto de llegar, te sigo metiendo el vibrador un poco y sacándolo. Te derrites de placer. Mi mano deja tus huevos y te agarro la nalga con fuerza contra mi boca. Me la meto y la saco presionando con la lengua, mi lengua saborea tu glande en círculos suaves, intensos, relamiendo ya tu preciado líquido. Sigo con fuerza, intensa y noto como ya estás apunto, te presiono de nuevo el vibrador en el ano y succiono tu polla fuerte una vez más, elevas tu pelvis hacia mi boca presionando hacia mi boca, te sujeto con fuerza, te araño y con mi lengua jugando terminas explotando con un… —Ostia! Qué bueno!