CONVERSACIONES GUARRONAS
Fecha: 28/12/2017,
Categorías:
Fetichismo
Autor: gadessexi, Fuente: xHamster
Muchos de vosotros me habéis preguntado si me gusta tenerconversaciones guarronas (Dirty Talk) mientras estoy con un chico. Me parece que es una pregunta peligrosa, porque la respuesta es que sí, que además de gustarme me excita muchísimo, pero creo que cuando hablamos de este tipo de conversaciones no todos tenemos lo mismo en mente.Hay chicas a las que les gusta que las insulten mientras lo hacen con un chico. Se ponen a cien si las llaman “putas, “zorras”, “comepollas” o cualquier otra burrada que os podáis imaginar, y si el chico lo adereza diciendo “te voy a partir el coño” o “te va a sangrar el culo”, rozan las puertas del orgasmo. Esto es genial, y lo respeto completamente porque a cada una la excitan cosas diferentes y todo es lícito mientras no hagas daño a nadie y sea consentido. Ahora bien,a la mayoría de las chicas no nos gusta que nos insulten ni en la cama ni fuera de ella.Demasiado porno os ha robado la imaginación, sé que no a todos, pero sí a muchos de vosotros. Por eso, muchos pensáis que la única forma de tener una conversación guarrona es repitiendo los topicazos de las películas porno, sin daros cuenta que hay muchas formas de tener conversaciones cargadas de erotismo sin necesidad de caer en el insulto.Lo primero que tenéis que tener claro es quela idea es excitar la imaginación, y para ello no es necesario estar besándoos, ni siquiera estar a solas o juntos. A mí me encanta, cuando vamos de camping, decirle a mi chico a mitad del trayecto lo que le voy ...
... a hacer esa noche: “Te voy a desnudar y me voy a poner a besarte todo el cuerpo, de arriba a abajo, por delante y por detrás, te voy a lamer, me voy a rozar como una gata, y luego, si te portas bien, vas a comerte algo muy rico”. Esta frase u otra similar basta para encenderle, y se lleva todo el viaje, que por lo general es aburrido, dándole vueltas a la idea, excitadísimo, y al empezar a montar la tienda de campaña él se me acerca en un momento en que hay poca gente y me dice, por ejemplo: “Te lo voy a comer con muchísimas ganas, porque vas a estar mojadísima y sabes que así es como me gusta. Y me vas a agarrar la cabeza y me vas a dirigir, pero cuando creas que no puedas más me voy a apartar y entonces me vas a suplicar que te la meta. Y si te has portado bien, tendrás lo tuyo”. Y ahí soy yo la que me quedo con las patitas temblorosas, contando las horas para cenar y retirarnos a... ejem, “dormir”.Si estás hablando por teléfono con tu chica, y crees que la ocasión lo merece, dile algo sensual, como que tienes ganas de besarla desde el cuello hasta los pies o de lamer su piel hasta que te queme con su calor. Incluso si sabéis que no podéis hacer nada en este justo momento, dile lo que le harías, pero siempre tirando a lo sensual más que a lo explícito, y dejando muy claro que quien iba a pasar un buen rato es ella. La idea no es que ella piense que quieres correrte, sino que estás deseando darle un rato de placer. Y si es tímida, pues le preguntas qué te haría ella, incluso ...