LA BODA DE AURORA Y SU AMANTE ANSELMO - Relatos Eróticos

LA BODA DE AURORA Y SU AMANTE ANSELMO

... vino a saludarme fue Kan, le pregunte donde estaba su dueña y él como si me hubiera entendido, fue delante de mí hacia la parte de atrás de la casa. Allí estaba, agachada, arreglando el jardín, tenía una camisa solo anudada en la cintura que, al estar sin sujetador, le dejaba mostrar sus precioso y magníficos pechos y una falda muy pequeña que al estar agachada casi se le veía su hermoso culo, pensé que me quedaba con las ganas pero Kan (dios lo bendiga), le metió la cabeza por debajo, le levantó la falda y empezó a lamerle su gran coño, ella se estremeció y le dio las gracias, (yo también), luego se giró y me vio. Me saludo muy efusiva con un abrazo y dos besos, ahora me estremecí yo al sentir sus duras tetas contra mi pecho.  ¿Mandaste tú a Kan?, me pregunto.  Prefería hacerlo yo, pero él se adelantó.  Como sabes, lo mío no son los hombres, pero siempre hay excepciones. En ese momento Kan metió otra vez su cabeza por debajo de su falda y por la cara de Mary, estaba lamiéndole el sexo con tanta ansiedad, que parecía y sonaba igual que un perro sediento saciándose en un gran lago, ahora calculen una lengua tan larga, como la palma de una mano… grande. Ella por un momento entornó los ojos con la mirada fija en mí, si no se sujeta a mi brazo se cae, estaba teniendo un orgasmo bestial. Cuando se recuperó, unos minutos después, le dio las gracias a Kan y un buen morreo, luego nos dirigimos a la parte trasera de la casa, Pasado un gran seto bastante alto, hay varias ...

... construcciones, destaca un granero donde se aguardan los aperos y demás, las cuadras con gran capacidad para las mascotas y detrás de estos, pude distinguir varias casa de campo y otras edificaciones que no distinguí bien. Fuimos al establo más pequeño, tenían seis o siete caballos y al fondo había una zona grande que estaba despejada, solo en el centro tenían una gran mesa. Mary me dijo que todo se iba a desarrollar aquí, así que me puse a colocar algunas luces. A la hora prevista llegó Aurora con Anselmo. Ella solo llevaba una fina tela que le transparentaba todo. Tenía unas tetas grandes, bueno casi todo en Aurora era grande. Llevaba en la mano una gran zanahoria y tras de ella estaba su amado Anselmo, que era un precioso y gran caballo negro de raza árabe, fue semental de un rey árabe y tenia muchísimos hijos, (luego supe que era muy valioso), Anselmo estaba como hipnotizado mirando para Aurora, cuando me fije vi que su polla, (creo que podía medir 50 cm o más) estaba totalmente a la vista y la golpeaba contra su barriga. Ella se dirigió a mí me saludo con dos besos y dijo.  Cuando quiera podemos empezar. ¿Cómo tengo que hacerlo?  Olvida que yo estoy aquí, haz lo que quieras, piensa que estás sola, tú y tu gran amor. En ese momento empezó a entrar los amigos y vecinos que estaban en la finca, se fueron colocando alrededor pegados a la pared. Me extraño que casi todos miraran muy atentos para mí. Al ver esto le pregunté a Mary.  ¿Y esto?, ¿qué hace toda esta gente aquí?  Han ...