Depredador (3) Tiago el brasileño (2)
Fecha: 03/01/2018,
Categorías:
Gays
Autor: ZLAZKO-KAI, Fuente: CuentoRelatos
... embestidas. Yo me dejaba llevar por la excitación y la lujuria, me calentaba a tope verle la cara cuando me miraba, y la forma en la que ponía su boca mientras me mamaba la polla. Entraba y salía brutalmente de su garganta al ritmo que yo le marcaba, estaba dispuesto a partirle la boca a pollazos, y a destrozarle la boca de guarra chupa pollas que tanto gusto me estaba dando. Noté mi esperma en ebullición dentro de mis huevos, y en ese momento pensé, "Tienes que frenar un poco Luis... no te corras todavía" y comencé a suavizar el bombeo en su hocico. Ya más relajado, pero igual de caliente, Tiago pudo saborear tranquilamente mi polla, succionando el pre-cum que emanaba de mi glande y pasar su lengua a lo largo del tronco. También me manoseaba el culo tocándome los apretados glúteos, y pegaba su nariz entre mis piernas, para olfatear como una perra en celo el olor a macho cachondo que yo desprendía. Poco a poco fue bajando con su lengua, primero por mi escroto, lamiéndome los huevos uno a uno con delicadeza, y después continuó hasta llegar a la raja de mi culo, encontrándose con mi ano. Cuando su lengua rozó mi agujero, me flaquearon hasta las piernas del gusto, estaba en medio de un sueño y no quería despertar jamás. Me besaba y me mordía suavemente las nalgas sin dejar de apretármelas con sus manos. Después ma las abrió todo lo que pudo, dejando ante sus ojos mi preciado boquete. Yo me incliné un poco más, abriendo más las piernas para que Tiago pudiera chupar mejor, y él ...
... no tardó en sacar la lengua y pasarmela desde los huevos hasta el principio de la espalda. Volvió a lamerme todo el culo, parándose un buen rato en mi agujero, lamiendo y jugando con su lengua mi lengua, e intentando penetrarme con ella. - ¿Te gusta mi culo cabrón? - - ¡Uffff... Me encanta tío!... Pero más me gusta tu polla. - - ¿Quieres que te folle otra vez, putilla brasileña?... ¿Quieres sentir mi pollón dentro de ti? - - ¡Mmmmm!... Siiiii... Fóllame macho cabrón. - Me senté en uno de los sillones que guardábamos en el almacén, y Tiago se me subió encima de cara a mí, dispuesto a sentarse y empalarse el ano hasta el fondo con mi pollón. Pero antes se lo restregó por toda la raja del culo, cogiéndolo del tronco con la mano y pegándose con él varias hostias en el agujero de entrada. Después apuntó la punta de mi polla en el centro de su ano, y poco a poco se la fui colando hasta embucharle tres cuartos de carne dura. Con un brusco movimiento y un buen meneo de culo, Tiago se encargó de empalarse mi pollón entero hasta los huevos, dejando caer todo su peso sobre lo que quedaba por tragarse. Una vez dentro y con el boquete del culo todo lleno, Tiago empezó a pegar saltos y a cabalgarme la polla sin dejar un solo centímetro por recorrer. El vaivén de arriba y abajo y la fuerza de la gravedad, se encargó de que mi polla fuera deslizándose fuertemente por dentro de su recto. El dolor que sentía Tiago era intenso, lo escuchaba gritar mientras lo abría por la mitad, y se quedaba sin ...