Reconciliacion de un cornudo y su novia en su fies
Fecha: 06/01/2018,
Categorías:
Fetichismo
Voyerismo
Tabú
Autor: parejafartun, Fuente: xHamster
... reemplazar a uno, cuando Manuel, gateando sobre la cama, vino a donde estaba el culazo en punta de Malena.Se juntaron los tres y se dio un momento de cierta zozobra.—Me toca a mí —reclamó Manuel.—Pero es que esto lo tenemos que hacer entre dos —dijo el llamado Rompeculos—, y nosotros nos conocemos bien.—Chicos... —me escuche decir—. Va a haber tiempo para que me la cojan todos...Mi novia me apoyó.—El cornudo tiene razón... Manuel, ¿por qué no te entretenés con él, mientras tanto?¿Malena estaba hablando de mí? Observé a Enlechador acostarse boca arriba sobre la cama. A Male ir y colocarse sobre él. Miré a Rompeculos colocarse detrás de mi novia, mientras ella escondía una mano bajo su vientre, acomodando la garcha del macho que tenía abajo, lista para dejarse clavar. Y mucho más no pude ver, porque Manuel, mi futuro portero, vino hacía mí, me tomó de los pelos y llevó su pija a mi boca.—Mmmfffgggh… —me sorprendí con la boca llena de verga.—Muy bien, Betusto...Me saqué como pude el glande gordo y gomoso.—¿Qué carajo? ¡Malena, este tipo me metió la pija en la boca!Malena, que ya estaba ensartada en la concha por el de abajo, me miró mientras Rompeculos le tomaba las nalgas y se acomodaba detrás de ella.—¡Ay, Betu, no empieces...! No me vas a arruinar el cumpleaños, eh? ¡Agarrá la pija del señor Manuel y chupá!El portero no esperó por mi respuesta. Volvió a agarrarme de los pelos y a obligarme a tragar verga.—Así, putito, muy bien…Nunca había hecho nada semejante. Ante la ...
... irrealidad del evento recuerdo que lo que más me preocupó en ese momento fue qué consecuencias me traería eso que me estaba haciendo el portero en mi futura convivencia en el edificio. De seguro no iba a ser buena.Mientras la verga de Manuel horadaba mi boca y me forzaba a masticar carne, de reojo observé lo que le estaban haciendo a mi novia. Rompeculos ya le había separado las nalguitas a Malena y le arrimaba una vara de carne de dimensiones temibles.Escupió. Ensalivó. Masajeó el ano de mi novia, aunque con cierta dificultad porque Enlechador se la estaba clavando desde abajo y hasta los huevos, y eso le sacudía el culo para arriba y para abajo con cada pijazo.—Los dientes, putito, los dientes… —me reclamó el portero, que me tenía ahora tomado por las dos orejas y me cogía la boca. Abrí más para no lastimar la verga del Sr. Manuel, y el solo movimiento hizo que me mandase la verga más adentro.—¡Aggggggghhhh…!—Muy bien, putito, tragá... Tragá... Tragá...Rompeculos ya había apoyado la cabezota de su garcha en el delicado agujerito de mi novia.—Ahí te va, putón —avisó. Vi cómo Male dejó de montar la pija, quedando como suspendida en el aire por un segundo, ensartada abajo pero expectante por la segunda pija.Vi cómo Rompeculos empujó lleno de lascivia y mi novia entrecerró los ojitos.—Síííííí... —murmuro la muy puta.Y el glande gordo, lleno, penetró por completo el culito virgen de mi novia.—Mmmgggfff… —volví a quejarme.Rompeculos empujó y clavó un poco más. La verga, muy ancha, ...