Diego y su amiga trans.5 - Relatos Eróticos

Diego y su amiga trans.5

... a llegar al jacuzzi se introdujo despacito, se sentaron uno al lado del otro, y ella le masajeaba la poronga a Diego, la tenía en total estado de reposo por las dos acabadas recientes. Pero Erika era capaz de provocar cualquier cosa en Diego hasta que se le parara nuevamente. Te acariciaba la pija mientras lo besaba en los labios, y él también le agarró la poronga a ella, todo con movimientos suaves y delicados. Despacito despacito entre besos y caricias ambos estaban excitando, Erika no quería perder ni un segundo sin disfrutar al lado de esa persona que le había revolucionado la vida. Se seguían besando,, y cada vez se excitaban más, Diego sintió que su pija estaba dura nuevamente, el mismo se asombraba del poder la recuperación que tenía había acabado dos veces y ya se le estaba poniendo dura de vuelta encima no le ardía para nada la cola, se sentó al borde del jacuzzi y la invitó a Erika que le chupa la pija, la travesti gustos acepto y se tragó de un solo bocado la pija de Diego. Sí bien la poronga de Erika era muy grande cerca de unos 23 cm y su grosor también era importante, Diego no le iba en saga, v sofija era apenas un poco más fina que andaría por los 19 cm, Erika con total maestría que le había dado su profesión en la calle, y así a dar las estrellas a Diego, se la llevaba al fondo de su garganta, esos 18 -19 cm que portaba Diego, la maestra de Erika se lo ponía totalmente dentro de su boca. El con los pies dentro del yacusi sentado al borde y ella con medio ...

... cuerpo dentro del agua le estaba pegando una chupada magnífica, Diego tenía los ojos en blanco disfrutando de lo que le hacía la travesti, levantó la vista y vio en el espejo de enfrente, el majestuoso y monumental orto de Erika, mientras ella dedicadamente el chupa la pija el admiraba ese majestuoso infernal y maravilloso orto. Y sintió unas ganas irrefrenables de cogérselo. Me sacó la pija de la boca, se metió dentro de yacusi, y Erika lo dejaba hacer, mientras no salía de su sorpresa. Se había dado cuenta que Diego le quería coger el orto. Usa sus codos en el borde del jacuzzi arqueo su cintura y sacando bien el orto para atrás, se le ofreció para que Diego se deleite con él. El se afirmó, Isela comenzó a poner despacio, a pesar de que Erika lo había usado para trabajar durante muchos años lo tenía bastante apretadito, aunque claro, los que iban con ella albergue semejante poronga lo que menos querían ir a cogerla. Diego se afirmó y comenzó a cogerla, es una sensación indescriptible, se habían invertido los roles y esta vez Erika era la que ponía el orto y Diego era el que cogía. Se sentía raro pero hermoso, todo era perfecto, ese orto era el estuche de su pija. No podía creer todo lo que estaba viviendo hacía un par de horas había encontrado a su mujer con otra mujer chupándole la concha, un travesti lo había cogido dos veces por el orto Y ahora él le estaba haciendo el orto al travesti. Pero está no era cualquier travesti, está rosada La sensación del enamoramiento. Sentía ...