Un negro me preño mi familia es racista - Relatos Eróticos

Un negro me preño mi familia es racista

Hola, mi nombre es Grecia, soy una chica alta, fornida, de piernas delgadas y de buen busto, usaba copa C, pero ahora que estoy embarazada toda la leche que tengo me agrando los senos a copa D. Soy de una familia clase media, tirándole a alta y este es mi relato sobre cómo me preñó un negro, aún y que mi familia es muy racista.
Todo comenzó después de mi cumpleaños 19, espere al fin de semana para salir con mis amigas y nos fuimos de antro con la excusa de estudiar para los finales, yo siempre he sido buena estudiante y sacado buenas notas, pero la verdad es que por dentro soy una diabla y odio obedecer a mis padres en todo, así que en casa de mi amiga me maquille completa y tome de su armario ropa que si me viera mi familia y mis hermanos pensarían que soy una puta de calle,, no lleve ni tanga ni brasier. Antes de llegar recogimos al novio de mi amiga Alison y dos de sus amigos, ambos se veían muy altos y varoniles, peor yo solo tenía ojos para su amigo Rafael, se veía muy atlético y fornido, pero como mi familia ...

... siempre me instruyó en el estereotipo de que no me debía fijar en esa gente deje pasar la ocasión, claro hasta que llegamos al antro, ahí en alcohol se me subio muy rápido y me sentí muy cachonda por los bailes y porque los hombres se me pegaban mucho estimulandome, yo soy muy dejada cuando estoy borracha, pero en un momento llego mi querido Rafa y se me pego, en ese momento yo sentí fuego por dentro. Pasado un rato me dijo que nos fuéramos y yo le dije que si sin saber a dónde íbamos, nos despedimos de nuestros amigos y salimos, a lo que terminamos en un motel, yo estaba tan ebria que no me importo, y ya en el cuarto comenzó a besarme y acaríciame las tetas, yo me resistía porque solo podía pensar en mis padres ellos nunca me imaginarian cogiendo con un negro, pero no me importo, claro hasta que se bajó los pantalones y Vi el tamaño de su verga, de la pura impresión el alcohol se me bajo, me dió mucho miedo peor el seguía tocandome, la verdad seguía muy borracha peor tenía momentos de mucha lucidez, a lo que me deje llevar