1. Extraña atracción


    Fecha: 10/01/2018, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Esto es veridico. Hace unos años tuve un accidente y me rompi una vertebra. Estoy en una silla de ruedas, no tengo sensibilidad ni movilidad. Soy independiente y no necesita ayuda del terceros. Tengo una discapacidad y eso no me acompleja en absoluto. Pero me sigue gustando el sexo, y cómo no me corro, duro un montón de tiempo, dale que te pego, en la lesión medular es muy corriente la espasticidad, qué es un daño en el sistema nervioso central, esos son los síntomas, las pierna se mueven como si tuvieras un ataque epiléptico de cintura para abajo, con convulsiones y la polla en cuánto la toco un poco, se pone dura como una piedra. A todo esto. Tuve una relación con una mujer de lo mas flipante. Parecia una mosquita muerta y agüita. Su aspecto era normalito, no era fea, ni guapa tampoco. Pero tenía un buen culo y un buen par de tetas, tenía un cuerpo para comérsello. De comploxion delgada Al principio normal, un buen polvo, pero segun la fui conociendo y en especial sus puntos erógenos. La cosa ya fue a mayores, descubrí que le gustaban los juguetitos caseros, en especial los calabacineses. no solo eso, también tenía orgasmos vaginales y clitorianos, ademas, cuando le comía el cuello se corría como una loca, multiorgasmica y cada vez que se corría le daban convulsiones (Hay que ver, voy a omitir mas detalles que no vienen al caso e ir al grano). Recuerdo una noche que no olvidaré jamás, empezamos charlando y bebiendo una botellita de vino, al rato entre una cosa y otra, ...
    ... terminemos hiper-cachondos. Y empecemos con el ritual, yo me fui a la cama, y ella a la nevera a por el juguete, lo peló y lo calento en el microondas y vino conmigo. Empece comiendole la boca, y cuando llegue al cuello se fue como una loca, yo aún disfrutaba acariciándole y viendo como convulsionaba de lo sensible que tenía el cuerpo reaccionaba aún más cuando la tocaba jejjejej. Luego me metí entre sus piernas, .le comía la cara interior de los muslos y la hacía sufrir pasando mi lengua cerca de donde ella quería jajajaj al final le daba lo suyo, la recompensa óooooooooooh My God!!! ( así suena mejor ). Seguíamos echando un polvito, yo abajo y ella cabalgando, y segun se corría, la convencía para que volviese, una y otra vez, para que no parará, terminó esplotando de placern. Hasta cinco lo conté una vez. Terminemos con el calabacín, pero en esta primera ocasión, todo cambio. Ya había notado que le gustaba el sexo anal y como estaba como estaba, la convencdiciéndole que se metiera el calabacín en el coño y que se metiera mi polla poco a poco en el culo, cuando la tuvo dentro y bien encajada empezamos el trote, fue como estar en el cielo.aAntes de acabar le dije que me cogiera la pierna y la echara fuera de la cama, que la dejara en el aire vamos, claro la pierna empezó a moverse arriba y abajo, de un lado a otro y a temblar de tal manera que eramos los dos dando botes sobre la cama. Claro no duró mucho la cosa y plaff, tanto fue el gusto que tuvo que arquearse bastante, para ...
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