El paquete del profesor de Historia II by: LilRose
Fecha: 18/01/2018,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: LilRose, Fuente: SexoSinTabues
Esto es lo que ocurrió después de ese encuentro en su despacho. Primera parte:http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-31196.html Primera parte: http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-31196.html Después de es primer encuentro en su despacho,no volvió a ocurrir nada más .Había miradas picaras por parte de los dos o toqueteos " accidentales".Me había pasado los días pensando en él, en la suavidad de sus manos, en como me había masturbado. Había pensado tanto en él y en aquel momento a su lado que había terminado masturbándome bajo mis sabanas susurrando entre gemidos su nombre. Por lo que tres semana después,y con el curo a punto de acabar, me levanté con una decisión tomada. Aquello no podía acabar así, el profesor se merecía una recompensa por ser tan aplicado en sus explicaciones. Así que ese mismo día en la hora del patio y a sabiendas de que él estaría ahí, entré en el despacho. Él, al verme entrar en su oficina con aquellos pantalones vaqueros ajustados que remarcaban mi figura, con el pelo rojo suelto cayéndome sobre los hombros y con una sonrisa maliciosa en la cara, no pudo evitar sentirse sexualmente atraído de nuevo. Él me confesó que también había tenido que masturbarse en su casa recordando el olor de sus dedos cuando me masturbó. Incluso pensaba en mi cuando lo hacia con su esposa. Fue a levantarse para recibirme pero con un gesto le hice ver que no hacia falta. —-Tranquilo profesor, hoy no vengo a preguntarle dudas, solo a devolverle el favor de ayer. ...
... Puso cara de no comprender pero en cuanto pasé al otro lado de la mesa y le dí un suave beso en los labios comenzó a entender. Fue un beso calido en el que los labios se rozaron con dulzura. Después sintió la punta de mi lengua humedecerle la boca y por ultimo mi pasión juvenil besándole intensamente buscando entrelazar nuestras lenguas. Fue un beso tan intenso y pasional que no puedo evitar excitarse hasta que su sexo deformara la cremallera de su pantalón. Aunque él no podía saberlo aquel beso me había humedecido la ropa interior. Dispuesta a compensar a mi profesor me arrodillé entre la silla y la mesa y con dulzura, malicia y deseo reflejados en mis ojos fui soltando el cinturón y la cremallera del pantalón. El bóxer negro ajustado que llevaba se veía deformado por la tensión de su sexo. Desde tan cerca casi podía sentirlo latir bajo la tela. Sin pesármelo dos veces le di un beso. El cuerpo del profesor se convulsionó en la silla. Por encima de la tela fui recorriendo aquella polla con la que había soñado siempre, desde la base de los huevos, que desprendían un calor que hacia arder mis labios, hasta la cima de aquel capullo que ya imaginaba rosado y húmedo. Volví a sentirme tremendamente excitada. Mi sexo latía bajo mis braguitas ,esta vez blancas. Sin dejar de dar suaves besos al miembro erecto de mi profesor fue soltándome los pantalones vaqueros y buscando con la yema de mis dedos la humedad de mis braguitas. Entonces,nuevaente, llamaron a la puerta. El profesor se ...