llegue al cielo - Relatos Eróticos

llegue al cielo

... Riveros mientras empezó a llorar de nuevo. El dolor que sentía en su coño era muy fuerte sentía que la partieron en dos y los demás reían.
“miren como se la traga la ramera “”está bien apretadita y bien jugoso” vociferó el anciano, soltándole unas cachetadas en el culo y arremetiendo con fuerza, para seguidamente sentir un objeto grande pulsando en su culo hasta insértaselo hasta el fondo, arrancándole un inmenso gemido de dolor se sentía rota y sentía la sangre chorrear de sus agujeros, mientras las arremetidas en el coño seguían sin tregua, mientras el de la mamada volvía a seguir con la follada.
“si que boca más húmeda y rica puta “decía el viejo comenzando a bombear duro contra la boca de Cielo Riveros, violándosela con todas sus ganas dio unas fuertes y rápidas embestidas, y finalmente arremetió contra ella, dejándole su rabo anciano clavado en el fondo de su garganta, donde empezó a descargar su pastosa y amarga lechada ”bebe bebe puta no dejes ni una gota “decía pegando su cara al pubis sin poder quitar su boca dándole solo la opción de tragar para no oficiarse, mientras el viejo descargaba chorros y más chorros de esperma ácido y oloroso directo a la boca de la muchacha, que no podía hacer más que tragar si no quería asfixiarse con todo ese líquido entrándole de golpe en la tráquea. Cuando termino de correrse se quitó para darle permiso otra para meterle su polla en la boca.
“termina rápido que también quiero probar su coño y si se van a correr tomen una garra de ...

... vidrio y depositen hay su corrida para después echársela con una jeringa en la concha a la pequeña puta para no desperdiciar nada” le decía al de que se la tenía en el coño mientras el otro movía el dildo en su culo sin compasión y los otros se masturbaban viendo. El siguiente en follarle la boca se posicionaba mientras quien le daba en el coño empezaba a correrse, empezó a embestir con muchísima más fuerza y velocidad contra el coño de la pobre Cielo Riveros  mientras le frotaba el clítoris, finalmente, sin que él se detuviera de su polla empezó a manar un torrente de ardiente lava blanca y espesa que inundó el útero de Cielo Riveros . Había tanta leche que se le salió por las comisuras del coño el viejo jadeaba como un perro mientras no paraba de meter y sacar su rabo enorme del coño de la pobre chica, y seguía soltando allí su lechecita rica. En ese momento el siguiente de la mamada se acomodaba así como el próximo que le entrenaría el coño
“ tío, vas a desgarrarla con ese pollón de que tienes! ¡Jajajajajajaja!”Decían al próximo de la mamada, Cielo Riveros  no podía verlo, pero imaginaba que el tipo que acaba de abusar de su boca y el del coño no hablaba por hablar. Si había dicho aquello sería porque el otro violador debía tener una polla descomunal, por lo menos más grande que la suya. Empezó a asustarse. Cuando el segundo hombre le puso su verga pegada a los labios, ella no fue capaz de serrarla la tenía sujeta la cabeza con sus dos manos, así la obligaba a mantenerse ...