Mi dulce y recatada esposita
Fecha: 24/01/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Jessvelo, Fuente: CuentoRelatos
... probablemente en casa de su madre dejándole nuestro hijo argumentando que debía madrugada al día siguiente, 10: 40 la veo de llegar entro a la habitación se quitó toda la ropa y se metió al baño deprisa a darse una ducha yo la podía ver de un lado para otro de la habitación pero no encendía las luces potentes, por lo tanto mi visión no era muy buena buena que digamos, ella no sabía si yo ya estaba en mi puesto se la veía nerviosa y trataba de proceder ignorándome se volvió a meter en el baño y apagó todas las luces de la casa en ese momento me entró la desesperación pues no tenía ni idea de lo que estaba haciendo, se acercaba la hora y no paraba de temblar de la excitación fumaba un cigarro tras otro para calmar los nervios. 11:15 se empieza a ver movimiento ya que se enciende la luz del salón pero a esa ventana no podía asomarme si no quería ser descubierto deduje por las sombras que ya había más de una persona en la casa y unas leves sonrisas de Andrea me supuse que no estaba sola, pasaba el tiempo y no empezaba la acción, yo tenía ya un cuadro de ansiedad que no podía con él, seguía pasado el tiempo y parecía que seguían en el salón ya que era la única luz de la casa que permanecía encendida. La intriga me estaba matando, miro mi reloj y eran las 12:18, la muy puta no estaría follandose lo en la sala y no me dejaría verla, en fin yo ya estaba de los nervios cuando se apagan también las luces de la sala, l incertidumbre fue total hasta que no vi encenderse la luz del techo ...
... de nuestra habitación. El tipo tendría unos 35 años quizás estatura normal moreno, algo rellenito, yo no lograba verle la cara ya que estaba de espaldas y se besaban frenéticamente, debo confesar que esa acción me produjo un estado de culpabilidad tremendo, mi verga se vino al suelo con ver a mi amada en otros brazos y encima por iniciativa mía, joder, tanto fue así que baje mi vista para no verla, cuando levanté mi vista ella se había girado quedando de espaldas a la ventana, el tipo le había arremangado la minifalda hasta la cintura y le estaba dando una sobada de culo monumental, al ver eso mi miembro empezó a crecer, le hacía a un lado su tanguita e introducía un dedo en su coñito, mi visión era espectacular. Andrea se retorcía en señal de que la estaba poniendo a mil por hora, todo esto ocurría sin dejar de morrearse ella lo empujó hacia atrás hasta llegar a la cama, lo hizo sentar y se quitó la blusa y no llevaba ya sujetador, también se quitó la minifalda quedando solo con una tanguita color azul, le quitó la remera a él y lo hizo estirar hacia atrás para poder quitar sus pantalones, por debajo de su calzoncillos se veía que el tío estaba empalmado pues parecía tener un buen tamaño, Andrea aprovecho para encender las luces de las mesillas y ahí el escenario tomo otra dimensión, podía al menos ver el rostro del tipo y el de mí mujer que estaba desencajado, se veía que le estaba gustando él se incorporó y le saco su única prenda que le quedaba, su diminuta tanguita y ...