1. Acosado y seducido (4)


    Fecha: 24/01/2018, Categorías: Gays Dominación Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    ... hacer es barrer todo el departamento… -y lo hice seguido por ella, que iba supervisando mi tarea… De pronto, cuando estábamos en el living, sonó el teléfono: -Sí, hola, señor... … -Sí, lo tengo trabajando... Está barriendo el living… … -Sí, por ahora se porta bien, mañereó un poco al principio pero le di una buena bofetada y se amansó… … -Es muy lindo, sí, parece una nena de tan lindo… … -Calcule un par de horas, señor… … -Perfecto, señor, a esa hora se lo tendré bañadito y perfumado… … -Muy bien… Ah, y lo felicito por la conquista, señor, jejeje… Después del diálogo, que me avergonzó y excitó, seguí con mi trabajo por todo el departamento vigilado por la señora Chela, que cada tanto me apuraba con un par de chirlos, un nuevo y morboso placer que me hizo descubrir… -Vamos, putito, vamos… ¡rápido!... –me urgía después de las palmadas… Por fin terminé y entonces la señora Chela hizo que me quitara el vestido y me llevó al baño… -Vas a darte una ducha, sirvientita, para que recibas al señor bien limpito… -me dijo y cuando caía el agua caliente debí meterme en la bañera y obedecer su orden… Me secó ella con un toallón blanco y mientras lo hacía siguió con los elogios de mi figura: -Tenés un cuerpo increíble, putito… No pensé que en un chico fueran posibles estas piernas, estas caderas, esta cintura tan alta y fina… ¡Este culo!... Yo la escuchaba en silencio, excitado por sus palabras y por el vigor con que manejaba el toallón por todo mi cuerpo… Bueno, ahora al living a ...
    ... esperar al señor Trovatto… -y una vez allí me ordenó pararme cerca de la puerta, tras la cual había un corto pasillo que comunicaba con la entrada al departamento… Mi nuevo rol de sirvientita y los modos dominantes y severos de la señora Chela me tenían hirviendo de calentura y con un fuerte deseo de ser usado por Mi Señor… Él llegó poco después, impecablemente trajeado de azul, con corbata verde y camisa blanca, me ordenó que me arrodillara con las manos atrás y sin apoyar las nalgas en los talones… Saludó a la señora Chela con un beso en la mejilla y le dijo: -¿Así que se portó bien la putita? -Sí, es una buena sirvienta… -¿Se ganó un premio entonces? -Yo diría que sí, señor Trovatto… -Me alegro, porque tengo muchas ganas de darle verga… -Puedo mirar, ¿cierto? -Claro que sí, Chela, y vos, putito, arrodíllate que me la vas a chupar… -Ay, sí, Mi Señor… dije y me arrodillé ansioso mientras él se bajaba el pantalón y el calzoncillo… No hizo falta ninguna orden, porque era tal mi deseo de mamar esa verga que me prendí inmediatamente a ese hermoso biberón… La señora Chela, sentada junto a nosotros, me elogiaba con entusiasmo: -¡Qué bien la chupás, nene! ¡sos putito hasta la médula!... Mire, señor Trovatto, se la mete toda en la boca… -Sí, nunca tuve un putito mejor que éste… Semejante elogio hizo que me entusiasmara todavía más con la tarea a la vez que deseaba intensamente que Mi Señor se corriera y me llenara por fin la boca con su deliciosa leche… ¡Y por fin explotó entre fuertes ...