Cristina - Relatos Eróticos

Cristina

Te encuentras dando tu cotidiano paseo por la playa. Tu atuendo anuncia que el calor agobia tu cuerpo; así que lo ligero del vestido hace que se pegue de una forma casi estética a tu figura, si pongo atención podré ver tu figura desnuda a través del él. Y es que el calor es casi insoportable pero a la vez exquisito al combinarse con la brisa del mar, este ambiente te ha dado la idea de darte un refresco en el lugar que tu solo conoces; suena bien pero a la vez peligroso alguien podría observarte, pero nadie lo conoce más que tu, que más da!!. Llegas a la laguna que se forma con el choque de las olas sobre las rocas y debido a que es casi escondido por la naturaleza del lugar, el lugar es casi imperceptible a simple vista, perfecto para refrescarse tranquila. Observas a todos lados para verificar tu soledad y comienzas a despojarte del vestido, el cual resbala lentamente por tu figura hasta llegar a tus tobillos, la poca brisa del lugar hace que tu piel sienta esa sensación de escalofrió que recorre todo tu cuerpo. No lo piensas más y poco a poco te vas metiendo a la laguna, el solo contacto de tu cuerpo con el agua te provoca una excitación sublime y el combinar de tus figuras con las ondas del agua forman una imagen estupenda de tu belleza en la naturaleza del lugar. Es exquisito tu baño que te provocan suspiros y el sol acaricia tu cabellera húmeda, mmm… en verdad lo disfrutas, decides descansar en una esquina del lugar y observar tu entorno, cuando de repente bóxer vas ...

... que no estas sola, alguien te observa y tu reacción es miedo y tal vez un poco de vergüenza ¿ Cuanto tiempo habrá estado observándome?. No se te curre nada que decir ni hacer, así que decides ignorar tal visita, y te sumerges completamente, pero la idea de locura comienza a invadir tu mente, ¿ por que no, invitarlo a tu baño?, pero no lo conoces, pero que pasa si…comienza a convertirse en una obsesión… sales del agua y decides mirarlo fijamente a los ojos sin ningún miramiento, esa mirada de perversidad combinada con la sensualidad que solo tus ojos saben decir. Las palabras que expresan con la mirada lo dice todo, sin decir ni una sola palabra se acerca a la laguna, tú no dejas de mirarlo y sin miramientos se comienza a despojar de la ropa; evitas pensar en el desenlace de esto pero al mismo tiempo te enloquece. Desnudo se mete dentro de la laguna y tu solamente observas, poco a poco se acerca, más y mas cerca de ti…, de repente esta frente a ti, mirándote fijamente a los ojos y sin pensarlo más se besan y esa sensación eléctrica que recorre todo tu cuerpo, hace que con el solo roce de sus labios con los tuyos, sientas la necesidad de sentir su cuerpo pegado al tuyo. Las lenguas juguetean instintivamente. Son esos besos que te hacen perder el sentido, la noción del tiempo, esos besos de entrega total… Poco a poco se acercan a la orilla, llegando a su objetivo te toma en sus brazos y te coloca a un lado y sigue besándote pero sus brazos te rodean y comienzan a acariciar tu piel ...