1. Doña Luisa, una madura muy sabrosa y nalgona...


    Fecha: 15/09/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Santino_Lioncourt, Fuente: xHamster

    ... para contarme sus ricas aventurillas con amigos de su esposo e incluso hasta con un sobrino.Ella y yo, no habíamos tenido la oportunidad de hacer el amor, solamente de algunos toketeos, ya que, en ocasiones cuando mi mamá la invitaba a cenar, nos dábamos unas escapadillas para besarnos y manosearnos, mientras que mis papás y el esposo de ella platicaban muy amenamente en la sala, degustando de un trago.Deberás que me dejaba caliente esa mujer.La otra vez, en que su Esposo salio de viaje, fue una noche inolvidable, ya que, me invito a que llegara a su casa a quedarme a dormir con ella, y por supuesto, no había que desaprovechar la oportunidad. Así que, yo, muy gustosamente acepte la invitación, y llegué a la hora acordada.Cuando llegue, Doña Luisa, me estaba esperando muy ansiadamente, luciendo una Chiquifalda negra, bien ajustada, pegada a sus carnosas nalgotas, ensañándome casi la puntita de las mismas. Sus muy bien dotados muslos, cubiertos por unas pantimedias, eran la carta de presentación de esta fogosa mujer, quien con zapatos de tacón alto, dejaba ver su rica pantorrilla., como lista para la acción.Uyy…, yo me quede totalmente idiota, del tronco de mujer que pretendía devorar, ya que parecía una Rica Teibolera Madura.Yo no me aguante las ganas, y cuando ella iba caminando de espaldas rumbo a la sala, la tome de la cintura, pegue mi cuerpo con ella, y la empecé a besar muy lujuriosamente el cuello.Mis manos bajaron muy rápidamente, metiéndoselas por debajo de la ...
    ... chiquifalda, acariciándole sus ricos muslos, mientras ella abría sus piernas, para que yo pudiera hacer bien mi trabajo.Estando ella de espalda, le tome los pechos, en los cuales me di cuenta de que no traía puesto sostén, le metí las dos manos por debajo de la Blusa, y se los empecé a acariciar, de una manera lujuriosa, agarrándole cada pecho con una mano, haciéndoles circulo, y amasándoselos, a manera de que se calentara mas.Nuestro cuerpos eran una llama de fuego!!... Llenos de deseo, nos introducimos en la sala. Tocándonos, besándonos, y gimiendo de la gran excitación que estábamos padeciendo.En esos ricos manoseos, ella me desabrocho el pantalón, me metió la mano por debajo de ellos, y me empezó a acariciar el pene de una manera fantástica. Sus manos maduras, estaban ardiendo de deseo y su experiencia la ponía en práctica en esos momentos. Bajándome y subiendo el cuerito del pene muy sabroso, haciendo que yo estremeciera mis piernas de excitación.Luego, la puse en la pose del perrito por encima del sofá, le subí la chiquifalda hasta la cintura, dejándose ver esas nalgotas hermosas, adornadas por esa diminuta tanga negra que traía puesta.Baje mi cabeza, y empecé a devorar ese culo con mis labios y lengua, hasta llegar a su clítoris mojado y caliente. En el cual introduje tres dedos de mis manos, haciéndola brincar de excitación, haciéndole un rico mete y saca con la mano, mientras que con la otra extremidad, contorneaba y delineaba su raja.Después de unos minutos, me baje por ...