El cumpleaños de la tía Eli
Fecha: 10/02/2018,
Categorías:
Incesto
Infidelidad
Autor: Lman13, Fuente: CuentoRelatos
... al borde de la locura. La cadencia de la cadera de Eli y el balanceo de los pechos de Jess me tenían loco y yo no había podido terminar. Ya vestidas les dijo: - Despídanse del nene y vayan a dormir. Necesito hablar un ratito con él. Jess se me colgó del cuello con una sonrisa y me besó en la boca. Eli hizo lo mismo y se fueron a la casa. Ana y yo nos vestimos, yo mi típica playera con short y ella con la blusa y la falda corta de verano con colores claros, que llevó para ir de compras con sus hermanas. Nos sentamos en uno de los reclinables, me abrazó, me dio un beso en la mejilla y me dijo: - Te amo mi vida, te amo. Nunca nadie me había dicho algo tan lindo en la vida: “Solos tú y yo bajo una mantita, sin sexo ni nadie más”. - Y galletitas. - Sí… y galletitas... ¿De veras serías capaz de amarme sin sexo de por medio? - Honestamente Ana, al principio sí se trataba sólo de sexo. Tu forma de entregarte es absoluta, es como una fuerza devastadora que lo arrastra todo a su paso. Pero… después del incidente en la fiesta… Hice una pausa pensando como contar la historia. -Déjame contarte una de mis desaventuras amorosas. En una ocasión, una novia que tenía me dijo que no podría salir conmigo el fin de semana porque tenía que salir con sus padres a no sé dónde. El lunes me enteré que se había ido a una fiesta con unas amigas y que se la pasó súper divertida. Cuando la confronté el martes se disculpó, lloró y dijo que me quería y que no había pasado nada y todo eso. Seguimos ...
... saliendo juntos y al poco tiempo, me dejó porque en la fiesta esa conoció a un chico que tocaba la guitarra, después averigüé que se estuvo acostando con él, el poco tiempo que seguimos viéndonos. Me sentí deprimido unos días, varios para ser honesto, pero nada más. Ana estaba atenta y un par de lágrimas escurrían sobre sus pecas. -Ahora, cuando vi al tipo ese deslizar su mano por tu espalda hasta… bueno hasta donde vi que llegó. No pude más y me fui a beber. En el fondo creí que la historia se repetía. Claro que tú no me engañaste ni te acostaste con él, pero yo sentí nuevamente esa sensación de que era yo poca cosa para la mujer que me gustaba y con la que creía que… ¡En fin! No tengo que decirte nada de esto, tú estuviste ahí. Pero esa misma noche me demostraste que en verdad te importo. En lugar de disculparte y mentirme para irte de nuevo con tus amigos decidistedemostrarme, no decirme,demostrarme que tus palabras eran ciertas. Olvídate de Brenda, olvídate de Karla. El sexo fue genial, sí. Pero la lección que les diste a esos tipos, ¡oh Dios, fue formidable! El que me hayas dado mi lugar a tu lado. Que te le plantaras de frente al tipo ese y le dijeras que yo era tu hombre… Ana, ese ha sido, sin discusión, el momento más feliz de mi vida y no tuvo nada que ver con sexo. Tuvo que ver contigo diciéndole a todo mundo que eres mía. ¿Puedo amarte sin sexo de por medio? ¡Puedes apostar tu vida a que sí! Ana tomó mis mejillas y me besó aún con lágrimas en los ojos. - Si debo serte ...