1. Una lagrima por Astrea


    Fecha: 13/02/2018, Categorías: Dominación Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... de lo que me había hecho me siento bien conmigo mismo y más después de ver su cara de satisfacción por el triunfo obtenido, en el fondo me había gustado por ver que había complacido a mi Señora y más ahora que la estoy contemplando, está increíble con su maravillosa - Todavía no he acabado contigo -me dijo. Me desata y tirando de la correa me lleva entre arrastras y a cuatro patas hasta su habitación - esto ha sido sólo el principio, perro. Yo ya no me atrevo a decir nada, ya me puedo esperar cualquier cosa, una vez en su dormitorio me ata los piernas y las manos a la espalda, me hace sentarme en una silla, a la que me ata uniendo mis muñecas con mis tobillos, esta vez si que ha atado bien, no hay forma de mover un músculo, esto y completamente inmovilizado, posteriormente me amordaza y me venda los ojos. Ya no sé que pensar, no quiero ni imaginarme lo que me podría pasar. Pero pronto lo iba a notar, eran los pellizcos de una pinzas las p - ¿deseas correrte? -me preguntó dulcemente acercando su boca a mi oído yo sin poder decir palabra sólo muevo la cabeza en señal de afirmación, mientras ella continúa manejando mi miembro a su antojo - ¿de verdad que lo deseas? ¿lo deseas mucho? - me volvió a preguntar, ahora en la otra oreja mientras, muevo la cabeza cada vez más rápido, me tiene en sus manos pero es un placer indescriptible, la corrida iba a ser de las que hacían época y cuando siento por las tuberías de todo mi cuerpo, que el volcán en erupción en que se ha convertido ...
    ... mi polla va a explotar.... mi AMA vierte sobr e este la cera de una vela caliente, y todo lo que podía haber sido se queda en nada - ¿ves lo fácil que es controlarse? -me decía desde al oscuridad de mis ojos vendados, desde el silencio de la mordaza, desde la inmovilidad de mis ligaduras, no puedo dejar de tener su imagen presente, su mirada altiva, sus gestos de superioridad... sólo tengo algo en mi cerebro, su figura; la operación la repite una, dos y tres veces más s in permitirme llegar nunca al orgasmo. - a partir de ahora seguro que empiezas a pedirme permiso antes de tocarte y seguro que no te corres si no te lo he permitido yo. Desde luego tiene razón, cuando se cansa me desata y me quita la venda , la mordaza así como el collar y el arnés, y se dirige a mi con voz desengañada - sabes Lete creo que lo mejor es que te deje en libertad y busques a otra Ama; me canso de tener que estar siempre detrás tuya para que cumplas mis deseos... - NO, -reaccioné-, se lo suplico mi Señora no me abandone, imploro clemencia, no me deje, Vd. es la mejor AMA no me deje a mi suerte sin Vd., se lo suplico Imploro clemencia, mientras intento que mi Dueña entre en razón y me permita ser uno más de sus muchos sumisos que forman parte de su pléyade, no me puedo creer que mi AMA decida despedirme, ya no sé que hacer así que me aferro a sus largas piernas y a sus perfectas nalgas como único motivo de m i existencia y empiezo a lamerle sus zapatos como si se me hubiesen acabado los argumentos y ...