Todo por la bici 6 - Relatos Eróticos

Todo por la bici 6

... que no le quede una sola gota de leche. Y José Si la apretaba para que tampoco le quede nada. El negro completamente agitado Se tiró nuevamente encima del sofá todo despatarrado y cuando José hizo sentarse el negro se lo impidió Quédate parado, José pregunto por qué?? Hizo que se pusiera agachado frente a él con Las Palmas de las manos las rodillas y sacando la cola lo más posible Entonces el negro sentado en el sofá se incorporó un poquito y empezó a hurgar con su nariz y su lengua en la cola del chico tratando de succionar la mayor cantidad de leche posible que esté tenía depositado en su cola, gira completamente inentendible lo que pasaba por la cabeza del negro había cosas que le gustaban y otras que no ya había otra que lo excitaba demasiado y Le volaron la cabeza. Al parecer le encantaba chupar su propia leche del culo del chico. Cuando lo tuvo bien limpia Ay sí le dijo sentate. José no sé animaba a preguntarle qué le pasaba por la cabeza porque el miedo lo invadía Entonces se quedó callado y lo observaba de reojo. El negro se sentía con una superioridad al chico siendo total dominador de la cuestión. José despacito se fue incorporando y trato de vestirse el negro también se puso de pie lo abrazo y lo jaló el pelo tirando la cabeza del chico para atrás le dijo ni una palabra de esto a nadie mucho menos al viejo. Chúpame un poquito la pija y andate. José se arrodillo y se puso una porquería de unos 7 u 8 cm prácticamente inerte en la boca y apretaba con su lengua a su ...

... propio paladar, apretada con sus labios y por momentos rasguña va un poco con los dientes, qué putito hermoso sos!!! Repetían negro mientras lo observaba al chico hacer su tarea, al cabo de un rato y de mantener la misma situación la pija del negro no cobraba vida entonces este en un gesto de fastidio le pegó un cachetazo al chico tirándolo al piso, vestite y andate le dijo con bronca. A la velocidad de la luz José se vistió se subió a su bicicleta y se fue. Todo el camino pensando en lo que le había pasado y no podía creer lo que le había pasado con el negro. Esa noche costo conciliar el sueño y el otro día reanudo su vida normal y salí a entrenar como siempre. Y como por arte de magia Lo que le había pasado el día anterior se le borró momentáneamente de la cabeza al ver abeto ese hombre que lo intrigaba y a la vez le gustaba. El hecho era que no sabía cómo hacer para llamarle la atención y que Beto se fijara en el. En el entrenamiento entablar una conversación Espero nunca pasaba a mayores. Nunca ibas solo Siempre había 10 o 15 ciclistas más. Cómo de la nada Beto le pregunta a José Si alguna vez habían dado al rodillo, Este es un artefacto que usan los ciclistas para entrenar con su propia bicicleta dentro de una habitación sin salida de ruta, José le dijo que no y Beto le dijo cuando quieras puedes venir mi pieza y entrenar un poco con el rodillo te va a ser muy bien te va a dar agilidad, ahí los caminos llevan abriendo para propiciar algún encuentro con Beto. Pasaron varios ...