Nicanor...
Fecha: 23/02/2018,
Categorías:
Gays
Voyerismo
Autor: renovatio111, Fuente: xHamster
... líquido que ya se derramaba de ella. Lo recogió con su lengua, la cual pasó por todo el glande y con su hermosa barba bien recortada, me acarició el borde de este, permitiéndome sentir un momento glorioso.Continuamos sobándonos y besándonos por largo rato, mientras nuestros penes se zurraban más abajo. Nicanor me dijo que todos los sábados su esposa salía a trabajar como voluntaria en el Hospital del Niño y que no regresaba a casa hasta el medio día del domingo. Por lo tanto me advirtió que me esperaba a las 7 en punto de la noche en su residencia. Pasaron varios días y Nicanor continuó bajando sus tirantes frente a mí y mostrándome su enorme instrumento erecto, mientras yo contaba las horas para nuestro gran encuentro sabatino.Llegado el día, Nicanor me llamó por teléfono a las 6:30 de la tarde avisándome que su mujer ya había salido para el hospital, como complemento me avisó que me dejaría la puerta abierta, que era sólo empujarla y entrar y que él estaría esperándome en su recámara. Y así fue, llegué a su casa a las 7 en punto como pactado. Empujé la puerta y tranqué, me dirigí presuroso hacia su habitación y allí estaba tendido en su cama cual largo es todo ese bello cuerpo musculoso. Me estaba esperando con sus fuertes piernas abiertas y en medio de ellas surgía la más hermosa torre de marfil que me halla podido imaginar. Era gigantesca y muy gruesa, estaba erecta, perfecta y muy recta.Culminaba en un bello y gigantesco sombrero napoleónico color púrpura que parecía ...
... más bien una enorme manzana mordida hasta la mitad. Rápidamente me quité mi camiseta y mis bermudas, mientras Nicanor moviendo su enorme pene en dirección a su velludo pecho me invitaba a acercarme a él rápidamente. Cuando me zafé mi calzoncillo, Nicanor mostró una enorme sonrisa de satisfacción por lo que estaba observando. Me metí entre medio de sus velludas piernas y acaricié suavemente sus robustos muslos para sentir todo el poder de mi macho deseado, coloqué mis manos debajo de su inmensa masa de huevos que colgaban debajo de la torre, a manera de campanas que llamaban a todos los creyentes al culto. Sentí el calor de su prepucio y metí mi cara en aquella selva de pelos negra y gris de donde nacía la enorme torre. Pasé mi lengua por el borde de su glande mientras acariciaba sus testiculos.Nicanor me masajeaba suavemente el prepucio y acariciaba la parte baja de mi ano. Me tomó con sus fuertes brazos y me sentó en sus bellos muslos, coloqué mis manos sobre sus enormes pectorales musculosos y besé aquel enorme pecho velludo. Lamí sus tetillas y pasé mi pene en medio de los dos pectorales. Nicanor gritó de la emoción, mientras su pene me golpeaba por debajo de mis testículos y me acariciaba la parte baja del ano, era un movimiento placentero.Metí su enorme glande en mi boca y no cupo más, era inmenso, su pene comenzó a derramar el primer líquido delicioso avisando que estaba disfrutando aquel momento. Lo lamí y luego lo restregué con mis manos en la cara de Nicanor. Lamí su ...