Móviles - 4
Fecha: 17/09/2017,
Categorías:
Dominación
Autor: perrofiel, Fuente: CuentoRelatos
... entrega, obediencia, sumisión. - Laura, no te muevas y observa de qué es capaz mi perrita. Empieza flor, demuéstrale de qué es capaz un pervertido como tú y lo bajo que puedes caer para mi. Empiezo a pajearme con la pollita en la mano, subiéndola y bajándola, descapullándola, dejando la punta a la vista y tapándola con los movimientos, mirando sin cesar la braguita de mi compañera, observando la parte manchada, oscura de la tela que delata lo excitada, lo mojada que está. La respiración se va haciendo más profunda, entre abro la boquita para tomar aire, las aletas de la nariz se abren, acelero el ritmo y cuando el calor de la explosión que va a llegar en cualquier momento, le digo. - Señora, por favor, estoy a punto de correrme, se lo suplico.... permítame parar... - ¿Lo ves, Laura? Es un perro salido, no aguanta nada. Solo piensa en ser usado, exhibido. Y eso le excita y humilla. ¿Qué opinas? - No puedo pensar Señora - su voz es tenue, entrecortada, avergonzada. - Baja el ritmo flor. Está claro que de alguna forma esto le está gustando. A ti ya lo sé. A ver si te ayudo un poco Laura. ¿Qué piensas de su pollita? ¿Son de las que te gusta? Mi mano no para de moverse, ahora más despacio, sin bajar la excitación, la mezcla de todas las sensaciones que me llevan a desear que nunca termine la humillación en la que me veo, la vejación que llena cada poro del deseo de ser tratado como merezco, en la entrega más intensa que siento, que vivo bajo Su dominio, mi Ama. - Si la miro bien ...
... si que es pequeñita Señora, sí -ha tardado en dar respuesta, pero se une a la humillación que está Usted despertando en Su perro Señora - Lo acabo de tener claro, creo que me gustaría más grande. Oigo cómo se ríe Usted y eso me complace saberla feliz, satisfecha. - Entonces, ¿crees que pueda complacer, darle placer a alguna mujer con esa pollita? No te he dicho que pares flor. Y no se te ocurra correrte. - Señora, lo dudo - de alguna forma le está excitando la situación. La braguita empieza a mojarse más todavía -. Con esa cosita casi que no puede darse placer a él mismo. - mmm, que buen ojo que tienes Laura. Por eso lo tengo así. Vuelvo a ser mercancía, un objeto solo digno de ser usado, observado mientras me transformo en motivo de conversación, apartado de nada que no se me pida o de permiso para hacer. - ¿Cuánto hace que no te follan Laura? - Desde que estoy con Usted Señora, solo ha sido por el culo - responde. - mmmm, ¿y te ha gustado? - Mucho, sí. - no pares flor. Acelera el ritmo. ¿Probamos una cosita Laura? Noto que se piensa la respuesta, insegura de lo que pueda tratarse. - ¿Qué es? - dice intrigada, aunque me suena a un sí, sea lo que sea. - Nada que no pueda gustarte. Aunque si me equivoco, solo tienes que decirlo. - mmmmm??? Vamos a probar Señora. - Perfecto. Para flor, ve a buscar las pinzas a cuatro patas. Laura, tu también las tuyas y poneros como estáis ahora. Vamos los dos a la vez a buscar las pinzas. Ya a cuatro patas a por las de tender la ropa unidas por ...