Mi primito me convirtió en su vicio - Relatos Eróticos

Mi primito me convirtió en su vicio

He de decir que es el primer relato que escribo y que no se si lo haré bien. Bueno esto empieza cuando me compro una casa a las afueras de la ciudad, entonces un primo viene a pasar una semana a esta. Nos describiré yo soy de piel morena y pelo negro, llevo una vida bastante acelerada y consumo cannabis y chocolate, mi primo sin embargo es rubio con los ojos verdes claros algo más joven que yo y más saludable jajaja vamos todo lo contrario. Bueno mi primo, de nombre Miguel vino en verano, el día que llegó compre marihuana y chocolate para una semana, y cuando llegó a la ciudad cogió un taxi hasta mi casa. Cuando llegó, todo muy normal, le enseñe la casa y deshizo las maletas, al terminar fuimos a comprar y ya tuvimos la primera conversación interesante que intentaré reproducir. -Miguel- no sé si sabias que soy bisexual y la verdad es que no me molestaría tener algo contigo. A esto yo me reí y bromee, la verdad es que desde pequeño también me fijaba en los hombres. Compramos comida basura como acostumbro y volvimos a la casa, Miguel se puso unos pantalones cortos de futbol sin calzoncillos y sin camiseta y yo hice lo mismo, me eché un porro cocinando con mi primo al lado y empezó a colocarse y a tocarme el culo y la tableta y decir que bueno que estaba, además de estar ya colocadísimo el pobre nos pusimos a comer hamburguesas en los sofás, era ya la hora de la cena, terminamos de cenar y yo le estaba viendo una polla durísima y no muy pequeña unos 17 cm más o menos, por los ...

... pantalones a lo que hicimos algunas bromas y empecé a ponerme cachondo sin saber por qué, yo también tengo una polla grande y muy gorda unos 20 cm y casi tan gorda como mi muñeca, que todo el que la ve se queda flipando, se me marcaba muchísimo la polla y mi primo no paraba de mirarlo, le ofrecí verlo a lo que asintió rápidamente y después de sacármela deslizo su mano muy rápido y la enrolló en la polla y empieza a pajearme y yo no digo nada se bajó él los pantalones y yo me encendí un porro mientras me cascaba mi primo una paja flipante y le hice probar el porro nos pusimos ciegos y de golpe estaba haciéndole yo una paja a él y me para, me quita la mano y empezó a tragarse la polla entera yo me quedé flipando nadie antes se la había metido entera, me corrí en su cara y él se sentó en mis piernas y empezamos a besarnos en el mejor beso de mi vida muy largo y húmedo. Se puso a 4 patas y me pidió que se la metiera y me lo folle como nunca muchísimo rato y de muchísimas formas distintas. Primero a 4 y yo estirándole de los brazos hasta que me corrí en su culo, luego se subió encima mío y conforme me cabalgaba nos besábamos y tocábamos nos corrimos a la vez y su corrida callo en mi pecho, mi primo me dijo que lo probara y así lo hice. El sabor me encanto y se la comí hasta que se corrió 3 veces, de una me levantó y me tiró bocabajo, me penetró de golpe y grité muchísimo entonces el me tapó la boca con su mano y siguió al minuto ya me había acostumbrado y empezaba a disfrutar, ...