El señor Manuel XIII
Fecha: 09/03/2018,
Categorías:
Sexo con Maduras
Voyerismo
Autor: dbeni72, Fuente: xHamster
Esa noche tuvimos que cerrar las ventanas de mad**gada. El calor había llegado muy pronto, y a pesar de ser principios de junio, durante unos días bajó de golpe el termómetro quince grados, y con ello la intensidad de sucesos y morbos de los últimos días también cesaron. Era que cómo los cuerpos necesitaran descansar, y ese fresco impropio de la época, ayudaba a conciliar el sueño. De hecho esa noche nos tuvimos que levantar, además de a cerrar las ventanas, a por una manta a eso de las tres de la mad**gada. Para eso las mujeres regulamos peor la temperatura, y enseguida nos quedamos frías.Primero fui al baño, un poco destemplada, y acto seguido al armario empotrado del pasillo a por una manta. Me acordé del señor Manuel, y cogí otra para él. Me acerqué a su puerta, y se le oía roncar, y con el poco resplandor que había, allí le vi, tumbado, hecho un ovillo, y tapado con la sábana. Seguía con la ventana abierta. Con sumo cuidado, cerré la ventana, y le tapé con la manta sin que se despertara. Acto seguido regresé a la cama, y reconozco que en ningún momento tuve un solo pensamiento erótico con la situación de estar en su habitación. Ya os comento que esa bajada de temperatura también me bajó la excitación bastante.Al igual que las otras mañanas, preparé el desayuno a José, esta vez con camisón, bragas y bata, y cuando mi marido se fue, regresé a la cama, me tapé, y descansé plácidamente.La semana laboral de José acabó, y aprovechamos ese fin de semana para ir al pueblo, ya ...
... que la siguiente semana le tocaba turno de noche. Invitamos a nuestro vecino, pero prefirió quedarse en casa él solo, así que tras insistirle que viniera, y ver que no quería, nos fuimos a pasar fuera ese par de días.El domingo después de comer ya estábamos de vuelta, y otra vez un calor sofocante. José aprovechó para dormir unas pocas horas, y aguantar esa primera noche de la semana. Esto de los turnos es un auténtico rollo, y aunque ya son unos años así, trastoca todos los horarios de sueño.Yo estuve toda la tarde liada, poniendo lavadoras y cocinando para que esa noche cenara bien mi marido, y dejarle lista la fiambrera. Otra vez el calor se hacía insoportable, y más metida en la cocina gran parte de la tarde.El señor Manuel estuvo buena parte de la tarde en el salón con la tele bajita para no m*****ar el descanso de José, y antes de que se levantara, vino a echarme una mano con la cena. A pesar de tener todo listo para cenar más pronto que otros días, nuestro vecino se adaptaba a nuestros horarios de comidas.José se levantó, y se dio una ducha. Nosotros aún no lo habíamos hecho para no despertarle.Estuvimos hablando durante la cena de estos cambios tan severos que tenía el clima hoy en día, tan pronto frío, como otra vez un calor sofocante más propio de pleno verano.José se fue a arreglar, mientras el señor Manuel me ayudaba a recoger. Una vez todo recogido, le di la fiambrera, y salí a despedirle.José se despidió del señor Manuel que estaba viendo el telediario en el ...