De vacaciones
Fecha: 15/03/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: laparejapicante, Fuente: CuentoRelatos
... para sentir el bulto que en el pantalón de Luís comenzaba a crecer por la presión contra su culo. Mientras con las manos me toco la polla a mí. El trayecto fue breve pero de lo más agradable. Al llegar al 4 piso, la masa de japoneses se bajó y nosotros, tras separarnos para no llamar la atención, seguimos arriba. El séptimo era el nuestro. Al seguir el ascensor, con nosotros tres solos, Luís ya no pudo evitar poner una mano sobre su pecho, sin retirar la mirada de mi para buscar mi aprobación con los ojos. Yo, afirmando con la cabeza le di permiso para disfrutar. Al llegar al quinto, se detuvo el ascensor. Entonces Luís dijo, "esta es mi planta, si quieren les invito a mi suite a tomar una copa". Nosotros nos miramos y luego afirmamos con la cabeza a la vez, diciendo "Vale, gracias. Aceptamos la invitación". Al entrar a la suite nos sorprendió el tamaño de la misma, era como 5 veces la nuestra. Incluso contaba con una sala la cual tenía un gran sofá, dos sillones y una barra de bar. Luís se dirigió al bar y nosotros a los sillones a sentarnos. Yo me senté en uno de los sillones y Gaby se sentó de lado en el otro, poniendo una de las piernas sobre el brazo del mismo, de esta manera el vestido se subió un poco hacia arriba, mostrando claramente su tanga y quedando totalmente abierta hacia la zona del bar donde Luís estaba poniendo las bebidas. Luís miraba con morbo hacia las piernas de Gaby mientras preparaba las bebidas. Luís nos puso un par degin tonics y nos los acercó. Me ...
... dio uno a mí y luego al ir a darle el otro a Gaby, premeditadamente, derramo un poquito sobre el escote, y dijo. - L: Uy, lo siento, te cayo un poco en el escote - G: Ummmm, muy mal, ¿y quién me limpia esto ahora? - L: Si quieres yo, no te importa que... perdonad no se vuestros nombres - R: Disculpa, tienes razón, yo soy Raúl y mi esposa se llama Gaby. - L: Encantado Raúl y Gaby. Bueno, repito, ¿Me das permiso para limpiarla Raúl? - R: Si claro, no te preocupes, disfruta del momento, que yo también disfruto viendo. - G: Exacto, ven y limpia todo bien. Luís se agachó y metiendo la cabeza entre su escote pasó la lengua sobre la zona mojada. Gaby dio un pequeño y tímido gemido. Luego Luís se sentó en el sofá de enfrente de nosotros y se frotó descaradamente su polla, la cual ya comenzaba a dar signos de endurecimiento. - R: Vaya, vaya, Luís, parece que tienes un pequeño problema bajo tus pantalones. - L: Si, efectivamente, y la culpable es tu mujer. - G: Cariño, me da la impresión que el pequeño problema de Luís va creciendo por momentos, ja, ja, ja. Luís no dijo nada, solo sonrió con la frase de Gaby, a la vez que nosotros. Entonces yo me levanté y me senté en el sofá con Luís, dejando un espacio entre ambos. Abrí las piernas y acomodé también mi creciente polla. Gaby entendió perfectamente la maniobra, se levantó y se colocó de pie delante, se sacudió la falda y se sentó en medio de los dos. Se recostó y abrió las piernas montando cada sobre las nuestras. Se bajó la blusa y ...