La sobrina de mi esposa - Relatos Eróticos

La sobrina de mi esposa

... interior, la cargue de cartón de cerveza, no fue difícil al ser.pequeña, 1.40 y unos 40 kilos, la subí a mi recamara y la avente a la cama, se sorprendió de mi cambio de actitud y le dije, quieres pito zorrita? Quieres macho no? Ahora te aguantas, la bese y baje por su abdomen hasta llegar a sus piernas, subí completamente su falda y pude ver una vagina linda, con los primeros bellos púbicos floreciendo,. Sin más me subí por sus piernas, mordiendo y lamiendo sus muslos, la parte baja de las nalagas, dejando que sientiera mi respiración en la entrada de su sexo, estuve así un rato hasta que por fin pase mi lengua rozando su clítoris, senti como se estremeció y soltó un gemido de.puta en celo, volví pasar mi lengua y comencé a comerme todo, desde el clítoris hasta la entrada, bajaba hasta el ojo apretado de su ano y volvía a subir, estuve como 5 minutos cuando sentí como sujeto mi cabeza, se retorcía y gemia de placer, de.prontl mi boca se lleno de todos sus jugos causas de su primer orgasmo, me separé y la bese con mi boca sabor. Su sexo, baje mi pans, subí sus piernas mi mis hombros, apunte mi verga y se la deje ir, grito un poco de dolor, y me dijo que parará, pero a esas alturas ya estaba yo hecho un animal, le dijez querías verga no puta? Ahora te aguantas que ya no voy a parar, se la saqué y la volví a meter de nuevo, está vez ya no gritó de dolor si no de placer, empecé a bombear una y otra vez y a las pocas embestidas ya no sé quejaba, ya solo gemia como la puta que ...

... era, no dudo que los vecinos escucharan pues sus gritos eran exagerados, pero yo seguí dando, estuve como cinco minutos y me salí, la puse de perrito y mientras la cogía tomaba su cabello como a mi esposa mientras disfrutaba de los asotes de mis palmas contras sus nalgas, sentí como tú o su segundo órgasmo, pues grupo y mordió la almohada, en eso no aguante más y dejé salir toda mi leche en su vagina recién mojada, una embestida más fuerte para que todo se quedará dentro. Se recosto y me acosté sobre ella, nos acomodamos y estuvimos abrazos como 5 minutos, y le dije, voy s.la farmacia, no puedes quedar.emebarazada, date un baño en lo que vuelvo. Tarde como 20 minutos pues no podía comprarla.en la farmacia de siempre, cuando volví la encontré viendo la tele, me saludo como si de mi esposa se tratara, le di la pastilla y me aseguré de que la tomará, no quería una sorpresa, me fui a mi estudio a trabajar, y como a.la hora regresa, y pregunta si todo bien, le digo que si que pase, le hago señas para que se siente en mis piernas.perl va directo a mi, se inca, saca mi verga y vuelve a mamar, no tardo nada en endurecerse de nuevo, la.levanto y la pongo contra el escritor, levanto su falda y se.la.meto si avisar, gime de.placer mientras escupo en su culo, un par de veces, con mi dedo comienzo a jugar a en la entrada de su ano, que se empieza a dilatar, saco mi verga y la coloco en la entrada, está vez con mas precaución, poco a poco la.meto, pero la muy zorra aguantaba el dolor y me ...