Adicto a recibir mamadas 2 - Relatos Eróticos

Adicto a recibir mamadas 2

Como les había dicho me encontré a la chavita en un parque tiempo después, me acerqué a saludarla y platicamos un rato. Después decidí probar suerte, le ofrecí darle dinero para que me la volviera a mamar, luego de un rato aceptó.
Nos fuimos a donde habían arbustos grandes y frondosos, me la saqué, ya la tenía bien dura de la emoción, pero la pendeja sólo volteaba a los lados. Un poco impaciente le dije
-Andale güey, no tenemos todo el día, hincate y empieza mamar.
Se hincó, pero sólo me la jalaba y le daba besos, no dejaba de voltear a tosos lados, le dije que eso no era una mamada. Me dijo
-Sabes qué mejor no, nos pueden cachar.
Antes de que se levantara le jalé el cabello fuerte, ella abrió la boca para gritar y aproveché para metersela hasta la garganta, le empecé a follar la boca bien duro, me dio coraje que me quisiera dejar así, ella se veía algo molesta pero no sentía que pusiera resistencia. Le dije
-Coopera, ahorita acabo rápido y nadie nos va a cachar, acaríciame los huevos
Bien obediente la pendeja lo hacía bien rico. 
Sentí muchas ganas de venirme, le dije
-Tragatelos todos para que no te manches
Encajandosela en la garganta y embistiendo tartando de que le toparan mis bolas en la barbilla me vine. La sentí tragarlos y se la saqué, ella respiraba y tocia agitada, cuando se recuperó un poco la puse a chuparla otro poco para que me la limpiara. Me la guardé y le di su dinero, me dijo gracias y antes de que se fuera le dije
-Si te dejas coger por el culo te regalo un iphone.
Se le iluminó la cara, pero se fue.

A la semana mas o menos volvió a ir a mi casa a preguntarme sobre el iPhone.

Si quieren que cuente como le rompí su culito virgen dejen su comentario 😉