El día que me sentí nena - Relatos Eróticos

El día que me sentí nena

Recuerdo que a temprana edad veía como mi madre se vestía frente a mi para ir a su trabajo, siempre le gustó usar tangas e hilos muy sexys, incluso casi siempre tenía erecciones al verla. Desde esos dias siempre tuve una fijación por la lencería por lo que no desaprovechaba cuando me quedaba solo para probarme sus bra, sus tangas, sus hilos e incluso sus tacos. Me encantaba verme al espejo y sentirme nena, incluso empece  a exhibirme por paginas de videochat en vivo a hombres de varias partes. En esos encuentros virtuales no se demoraron algunos en pedirme que metiera cosas a mi culito virgen. Al principio de dio miedo, pero luego accedí, y poco a poco fui metiendome deditos, hasta pasar a objetos más gruesos. Así descubrí el placer anal.

Pero no fue sino hasta que tuve 17 años que navegando en sitios porno gay que descubrí la aplicación. La primera vez que accedí vi como habían hombres gay cerca a mi casa buscando una aventura. Sentí un cosquilleo en la colita pues sabía que el siguiente paso era entragarme a un macho. Dude bastante hasta que un día mientras me masturbaba decidí que entregaría mi colita así que entré a la apllicación y cuadré una cita con un hombre de masomenos 30 años quien me convenció luego de enviarme varias fotos de su polla, un poco peludita y gruesa, no tan larga.

Despues de cuadrar el encuentro me bañé y mientras lo hacia empecé a masturbarme el culito en la ducha pues el jabon hacia que se deslizaran facil los dedos en mi culito que estaba ...

... ya hambriento. Me lave bien y me lo depilé y cuando salía de la ducha sentí que tocaron la puerta, así que me puse unas tanguitas rojas de mi madre y una pantaloneta y abrí la puerta. Cuando entró me fijé que era un hombre jóven, con barba, guapo y se le notaba algo nervioso. Lo hice seguir y lo primero que me preguntó fue "qué quieres hacer". Apenas terminó la pregunta me arodille y rapidamente le bajé la sudadera y me metí la verga a la boca (ya antes  había mamado verga pero esa es otra historia)  y  empecé a hacer contacto visual. Se la estuve mamando por varios minutos, y se notaba que le gustaba porque al poco tiempo ya me estaba taladrando la boca como una verdadera putita porno. Luego de estar en esas unos minutos, me dijo que si me iba a dejar comer el culo. Solo fue que dijera esas palabras para hacerme sentir bien perra y por supuesto que me paré, me acomodé en la cama, baje la pantaloneta y le dejé ver mis sexys tangas. El tipo no dudó en correrlas y empezar a jugar con mi culo con su lengua, y luego  introducirme deditos. me dolia al principio pero me fui acostumbrando.

al cabo de un rato el tipo me pregunta si tenia condones y yo no tenia, asi que le dije que me diera sin condon pero se negó, yo tenía muchas ganas así que insistí pero el tipo me dijo que le diera un break para comprar condones. asi que se fue de mi casa unos minutos a la tienda mas cercana, en esos minutos no dejé de meterme los dedos, para cuando llegara siguiera bien dilatado, y así fue. ...