A través del cristal - Relatos Eróticos

A través del cristal

Desde hace un tiempo soy la puta de un grupo de chicos; originalmente comencé con uno, y el después invito a otro amigo, y ese a otros y esos otros a otros y después de tantos amigos, les pedí a los tres primeros, que si no ponían alguna especie de filtro entre sus amigos y yo, simplemente yo me alejaría de todos ellos, había algunos que me parecían muy desagradables y bastante groseros, una cosa es que en el trance erótico te digan palabrotas o cosas calientes y otra cosa es que a malas palabras y todo el tiempo se dirigieran así conmigo.

Después de todo con unos cuantos me era suficiente.

Por azares del destino uno de estos chicos, me presento a otro amigo de el, que resulto ser un vecino muy cercano, de hecho la misma colonia.

La casa en la que actualmente vivo, esta en un monte, estoy muy cerca de la parte mas alta de este mismo, fuera de un fraccionamiento que si esta en el tope de este monte, este fraccionamiento, es mucho mas exclusivo que el área en donde se encuentra mi casa; algunas de estas casas están diseñadas, para tener o ser un mirador hacia la ciudad, se ve el valle completamente.

Alguna vez subí y y entre, me estuve paseando por el fraccionamiento, con la intención de saber los precios de los terrenos o casas; vi una casa que la mitad de esta es puro cristal, desde la calle de enfrente se ve la vista que tiene en la parte trasera, dentro de la casa se ve una gran sala, algunos muebles mas decorando el espacio, la calle por donde circulan los ...

... autos, para darle la vuelta al fraccionamiento pasa por enfrente a unos 10 o 15 metros. Describo todo esto para llegar al relato.

Mis tres amigos, me presentaron a un chico que me parecía conocido, no hice mucho caso, por que después de todo me pareció bastante atractivo, y tenia muy buen trato conmigo, quizá hasta un poco tímido, pero bastante cortes. Estos encuentros los llevábamos a cabo en el departamento de uno de ellos, si yo o alguno de ellos quería tener sexo, quedábamos de vernos ahí, la mayoría de las veces, así que después de terminar nuestra faena de ese día, nos quedamos platicando y resulta que vamos al mismo gimnasio, solo que en horarios diferentes, y probablemente nos hemos visto al entrar o salir de este.

De igual manera descubrí que la casa en donde vive el con su familia es esta casa con los cristales que dejan ver todo.

Este chico vecino mío me pregunto si el podría organizar un encuentro entre algunos amigos y compañeros de su universidad, el ya estaba consiente de mis condiciones, nada sin condón, sin golpes... etc. Prometió que todo estaría bien y yo podía estar a salvo y segura, todo seria con la idea de que yo la pasara muy bien. 

Cuando me entere que seria en su casa, jamás me paso por la cabeza que nos quedaríamos en esa gran sala de cristal, a la vista de todo el que pasara por enfrente de su casa.

La verdad es que ese día me di a desear un poco, me había pedido que llegara a las 8 de la noche, llegue 1 hora después, en cuanto llegue, ...