Nueva en el sexo - Relatos Eróticos

Nueva en el sexo

... la vas a chupar.
Ya había dejado de llorar y como no quería otra bofetada lo obedecí rápido. Me pasó su enorme pene por toda la cara y luego me lo metió a la boca, mientras yo chupaba el me lo metía más moviendo hacía adelante y atrás sus caderas. Lo ví tomar su celular y apuntándolo a mí comenzo a grabarme y decía.
-Así es como mi putita me da placer dentro de la escuela, le encanta tanto mi verga que no puede esperar a salir de clases para mamarmela y sacarme la leche. Di que te encanta mi verga zorrita...
Me la sacó para dejarme hablar y obedecí por miedo
-Me encanta tu verga.
Dándome golpecitos por toda la cara con su pene me contestó:
-Te la voy a meter hasta la garganta putita, te ves riquísima de rodillas pidiéndome verga.
Me la encajó hasta la garganta y sujetándome fuerte de la nuca me empujaba para meterla y sacarla mientras me follaba la garganta.
Lo escuchaba gemir y gruñir mientras me hacía chocar contra su pelvis. Su pene ahogaba mi garganta y me decía:
-Oh sí, putita, así me encanta, tienes una boquita mamadora.
Sacándola de golpe me ordenó:
-Levantate y súbete a ese escritorio, abre las piernas, me vas a enseñar tu conchita.
Sentándome sobre el pequeño escritorio me subí la falda abriendo las piernas y lo obedecí, el puso en primer plano mi vagina.
-Tu conchita peludita ya no es virgen por mi, di ¿quién te desvirgó putita?
Volteó la camara a mi y contesté secamente
-Tú
Su mirada amenazante me volvía a intimidar
-Te encantó como te cogí en ...

... tu casa verdad...
-Sí me encantó que me cogieras
-Verdad que quieres más verga, pídeme que te meta la verga...
-Meteme tu verga...
Volviendo a grabar mi vagina se acercó y comenzó a meterla despacio, yo me quejaba y hacía muecas de dolor, pues su pene era grande y gordo y yo aún muy estrecha.
-Que pasa putita ¿No te cabe mi verga?
-Está muy grande Samuel, me duele, sacala por favor 
El sólo se reía, metía y sacaba suavemente diciendo que le encantaba lo apretadita que estaba. Yo sentía como cada centímetro me invadía y volvía a salir lentamente. De repente lo sacó por completo escupió en mi vagina y de golpe lo metió hasta al fondo comenzando un duro y violento mete saca. Yo aún sentía dolor por los que mis gemidos sonaban un poco más a pequeños quegidos por lo fuerte que me penetraba.
Samuel disfrutaba de lo duro que me cogía.
-Que rico darte así mi putita, mira como gozas, se nota que te encanta que te coja así.
Enfocaba mi cara y luego mis tetas mientras me botaban por lo violentas de sus envestidas.
-¡¡Toma, puta, toma, toma, toma!!
Su fuerza aumentaba y sentí como se venía, sus calientes y espesos chorros me llenaron por dentro. Respiraba agitadamente, cuando terminó de llenarme enfocó mi vagina y sacó su pene lentamente, sentí como su semen escurría y salía de mí.
-Así se rellena de mecos a una puta.
Dejó de grabar y se vistió. Abrió la puerta y me entregó la llave.
-Deberías limpiar o se podrían dar cuenta que alguien te cogió aquí.
Riéndose se fue ...