Yo era feliz
Fecha: 22/03/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Helena, Fuente: TodoRelatos
... excitaba muchísimo. Yo soy la única que suelo bañarme después de comer, así que hice lo propio y me fui al mar. Estaba nadando mirando al horizonte, pensando en sus miradas, en la comida, cuando noté unas manos cogiéndome desde atrás, de inmediato oí la voz de Lau. Puso su mentón en mi hombro, y sus manos en mis pechos. No nos decíamos nada. Él jugaba con mis pechos que inmediatamente reaccionaron a sus caricias. Empezó a bajar una de las manos hasta posarlas en mi bikini, yo no tocaba, él mide más de 190 y yo no llego a los 170, él estaba tocando de pie y me sujetaba.
El mar igualaba nuestras cabezas, él tocaba por encima del bikini, pero no sabía que buscaba y yo no sabía qué hacer. Hasta que la excitación me llevo a poner su mano dentro de mi bikini y justo donde debía tocar. Empecé a notar lo grande que estaba su cosa y me refregué contra ella. Cuando ya no podía más, me giré, puse mis piernas en su cintura y en su oído le dije: “Libera tu cosa de ahí abajo, la necesito dentro”.
No tardo nada en bajarse un poco el bañador y yo en apartar mi bikini para buscarle la cosa y meterla dentro de mí. Le vi la cara al entrar, nunca había entrado. Me besaba y me movía a su antojo, y yo ya no recordaba lo que era vivir... Me inundo de su líquido como nunca me había ...
... sentido, yo me había corrido tres veces, jamás me había pasado. Me limpié como pude y salí del agua sintiéndole aún dentro.
No podía dejar de pensar en ese momento, en su intensidad, en su juventud, en mis orgasmos que jamás había vivido. Solo deseaba volver a tenerlo dentro de mí.
A esa misma semana Mónica vino a decirnos que Lau no iba a ir con ellos, que quería quedarse para estar con sus amigos. Mi cara se iluminó, claro que vigilaría que estuviera bien, nada deseaba más.
Estaba ansiosa para que se fueran, así que al minuto que los oí irse, fui a ver a Lau, me sonrió, entre y deje caer mi vestido al suelo, dejando ver mi lencería, se le iluminó la cara, me beso y me llevo a la cama de sus padres.
Nos pasamos 2 meses sin parar. Pasaba los días en su casa, mi marido creo que tuvo claro que yo tenía a alguien, mi ropa cambio por completo, mi look paso a ser algo importante, peluquería, estaticen, gimnasio... Pero él también sabía que ya no podía darme nada.
Me pasé los dos meses en casa de él, me vestía para él, íbamos desnudos por casa, me pillaba en cualquier lugar... Playa, centro comercial, tiendas, bus... y desde entonces siempre que él quiere ahí me tiene preparada, también él sabe que ya nos soy solo suya, pero que, si él me lo pide, los demás no valen.