Alcohol y sexo con mis compañeros de trabajo heterosexuales
Fecha: 30/03/2024,
Categorías:
Gays
Autor: JosraGream, Fuente: CuentoRelatos
... depilados, sencillamente ricos; yo ya estaba excitado desde hace rato, así que mientras olía y lamía los testículos de Manuel, me quité como pude la ropa de mi parte inferior, y comencé a masturbarme, ya mi pene estaba babeando y sentía cosquillas en el tronco.
Levanté mi cara por un momento y me di cuenta de que Luis ya estaba completamente desnudo y se había sentado en la cara de Manuel para que le chupara el ano; Manuel estaba en un estado de borrachera avanzado, sin embargo, respondía a los estímulos sexuales de manera activa y maravillosa, así que Luis no tuvo problemas y disfrutó de la lengua de Manuel en su trasero hasta que eyaculó como caballo; justamente cuando estaba eyaculando yo observaba los dedos de sus pies, como los doblaba por el placer (tengo un fetiche de pies muy grande); su semen salió disparado hacia su cara, le cubrió parte del ojo derecho y gran parte del pecho, cuando ya dejó de gemir y de eyacular, se bajó de la cara de Manuel, quien había quedado cubierto de saliva y del sudor de las nalgas de Luis.
Luis se quedó a un lado de la cama descansando, tirado boca arriba, sin decir ni una palabra, sólo respiraba de manera agitada, quedó destruido por el grandioso sexo, mientras tanto yo seguía ...
... disfrutando del pene y de los testículos de Manuel, los olía, los chupaba y los acariciaba, hasta que sentí que me venía, ya tenía unos cuantos minutos masturbandome, cuando sentí que ya estaba por salir mi semen, me metí el pene de Luis en la boca hasta la garganta, y ya lo demás fue inevitable, tuve un orgasmo riquísimo, puse mi mano en mi pene para que mi semen no cayera en la cama, y cuando terminé de eyacular, como cosas de hombre morboso, me acerqué hasta la cara de Manuel y le puse mi mano llena de semen en su boca, le dejé en sus labios toda mi carga de semen tibio y espeso, y luego de eso lo besé, entre los dos nos dimos un beso apasionado y nos bebimos mi semen.
Luis se quedó dormido apenas eyaculó, y Manuel estaba tan destruido por el alcohol, que sólo pudo ser manoseado y estimulado sexualmente por nosotros. Al yo terminar mis asuntos sexuales con Manuel y notar que Luis estaba dormido, me levanté de la cama, me puse mi ropa interior, fui a la cocina a tomar un vaso con agua y luego me regresé al cuarto, me tiré en la cama en medio de los chicos, y allí me quedé, mirando el techo de la habitación y pensando en lo que había hecho. Estaba seguro de que lo que hicimos era apenas el comienzo de una aventura morbosa entre amigos.