Relatos Íntimos de chicas bien jamás contados - Relatos Eróticos

Relatos Íntimos de chicas bien jamás contados

... (uniforme), zapatos limpios y bien boleados (hombres y mujeres) entre eso y otras cosas más que hacia el ambiente un verdadero infierno.

Era una escuela pública a la que yo asistía en esos ayeres y el ambiente social era algo denso (creo eso siempre ha sido y normal en las públicas, no es de una en particular) dicha escuela estaba la primaria y a un lado por así decirlo la secundaria, vamos estaba en el mismo predio, solo se separaba por un gran patio y al fondo los edificios. La entrada en la primaria era en una puerta (calle) y la secundaria era en otra, total era el mismo sistema, creo poder entenderme, no soy buena en ello, pero espero y se entienda vale…

La directora era una señora de edad avanzada que asumo tendría unos 80 años aproximadamente (al parecer tendría más pero aparentaba menos) pero tenía energía de sobra, aparte de ser muy enérgica, pues pasa que le tocó su cambio de plantel porque nunca supimos si se jubiló, si la cambiaron de plantel o simplemente murió, fue un misterio, pero quien vino a suplir dicha dirección fue un hombre maduro que puso un re vez a todo el plantel.

En las instalaciones físicas de la propia escuela había en la parte central con una jardinera que comunicaba a ambos edificios compactos (2 pisos) done estaba la sala de maestros, salones anexos para profesores, aula para materiales, bodega para las cosas de educación física, baños ultra limpios (solo para los profesores obviamente), salones contiguos y comunicaba hacia otro patio ...

... que estaba la secundaria, digamos que físicamente la escuela estaba dividida de los de primaria y secundaria con sus respectivas instalaciones para albergar a los alumnos. Le decíamos a dicha instalación (del centro) el anexo, porque no pareciera que fuera ni la primaria ni la secundaria, era el limbo, parecían oficinas que salían de la nada implantadas por así decirlo como había dicho y parecían oficinas de gobierno. Para llegar a dichas instalaciones era porque ya sea que querías aclaración de boletas y calificaciones, faltas injustificadas, firmas de boletas, exámenes extraordinarios, extemporáneos, junta o queja con algún otro profesor, junta con el prefecto, director o directora, inscripciones o que se yo, era obligado asistir si o si a dichas instalaciones para lo anteriormente mencionado.

Cuando entra el nuevo “Director” pues la situación cambia completamente en todo, la cosa se vuelve muy laxa o relajada, había parejitas que se iban a las jardineras (cerca del anexo) a besarse, se paseaban discretamente por uno que otro salón o sala de maestros (no exactamente ahí obviamente) para besarse con sus novios, los de secundaria se “refugiaban” para fumar uno que otro cigarro en grupo y nosotras (mis amigas y yo) íbamos de “rogonas” a visitarlos en dicha zona.

En esos ayeres obviamente ya existía la web, pero aún estaban vigentes las revistas de modas, de chismes que se podían conseguir en la tienda de la esquina y el contenido era trivial como lo básico de horóscopos, ...