Cuando mi patrón se emborracha le sale la loca que lleva por dentro.
Fecha: 12/04/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Gays
Transexuales
Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30
Cuando mi patrón se emborracha le sale la loca que lleva por dentro.
Cuando comencé a trabajar en la finca, como yo era el único peón, y no había otro lugar donde dormir, el dueño me hizo espacio en una de las habitaciones de la casa. Poco a poco fuimos limpiando la abandonada finca, preparando los potreros para recibir a las cabras. Luego nos dedicamos a ir limpiando la casa, y sus alrededores, por lo que, al mes de estar trabajando, y mientras limpiaba una de las habitaciones, abrimos unas cajas, que resultaron ser ropa de su exmujer. Tras volverlas a guardar, por lo menos yo me había olvidado de la existencia de esas cajas y su contenido. Ese viernes el patrón para celebrar la venta de unas vacas, abrió una botella de aguardiente, y para pasar el rato nos pusimos a jugar 21. Cosa que para ser la primera vez que yo jugaba, me iba bastante bien, pero a medida que seguíamos jugando, fuimos apostando lo poco que teníamos encima. Hasta que el patrón perdió el poco efectivo que cargaba encima, por lo que yo pensé en dar por terminada la partida. Pero por insistencia de él, seguimos jugando, solo que mi jefe comenzó a apostar la ropa que cargaba puesta, claro con la idea de que al terminar la partida se la devolvería. Al poco rato no tan solo perdió la camisa, sino que también los pantalones, los zapatos y hasta su ropa interior, quedando completamente desnudo. Fue cuando me di cuenta de que mi jefe era completamente lampiño, aunque la verdad es que después me enteré que él ...
... acostumbra a depilarse casi todo su cuerpo. Al verlo completamente desnudo, pensé nuevamente que había terminado el juego, o por lo menos eso pensaba yo, pero quizás por lo mucho que él había bebido, insistió en seguir jugando. Solo que me propuso que, si él perdía la próxima partida, él haría todo lo que a mí me diera la gana. Como yo también estaba algo bebido, acepté, pero sin ponerme a pensar realmente en que era lo que le mandaría hacer. Él estaba tan tomado, o borracho que bastaba que yo solo le dijera que yo había ganado, que él ni se molestaba en revisar sus cartas. Así que cuando volvió a perder, lo aceptó, de inmediato se puso de pie, aunque casi cayéndose de lo borracho que se encontraba, me preguntó qué era lo que yo quería que él hiciera. Y la verdad es que no se me ocurría nada, hasta que él mismo comenzó a darme varias ideas, las que en su mayorá me parecían o muy tontas, o ridículas. Cosas como que se vistiera y actuara como una mujer, digamos que eran la menos descabellada, comparándola con la idea de irse a pie al pueblo, tal y como estaba, para ponerse a bailar en el medio de la plaza del pueblo. Tras escucharlo decir la idea de que se vistiera y actuara como una mujer, le dije que me hubiera gustado esa, solo que no teníamos ropa de mujer. En ese momento el mismo me recordó las cajas de su ex, que estaban guardada en una de las habitaciones, y sin que hiciera falta que lo ayudase se dirigió a la habitación buscó en las cajas, y cuando regresó ya estaba ...