Cine Teresa: Puebla (27 de enero) - Relatos Eróticos

Cine Teresa: Puebla (27 de enero)

Ese día antes de ir pasé a comprar algo de lencería, pues ya no tenía nada. Compré unas medias negras, un liguero color rosa con negro y una tanga rosa. Llegué al Teresa más o menos a las 2 de la tarde, pagué la entrada y entré directamente al baño en donde me desvestí para poder ponerme la lencería. Una vez que me la puse fui al mingitorio para exhibirme un poco en frente de un sujeto que se estaba masturbando, una vez que me di cuenta de que mi ropa le excitaba empecé a acariciar mi trasero y mis piernas por encima de la lencería. Por desgracia era un sujeto algo penoso ya que se empezaron a escuchar pasos indicando que alguien se acercaba el baño, así que inmediatamente se encerró en el cubículo del baño. Decepcionado me subí el pantalón y bajé a la sala de exhibición. Como de costumbre, fui directamente al frente de la sala. Me sentí y pude ver a dos sujetos masturbándose mutuamente. No pasó mucho para que un sujeto se sentara cerca de mí. Creo que era el mismo tipo del baño pero ya no recordaba cómo era ni me importaba. Un pene es un pene. El sujeto poco a poco se acariciaba la pierna indicándome que copiara sus movimientos, después de un par de minutos me levante y me senté junto a él. Conduje su mano a mi pierna y dejé que me tocara tanto como quisiera del mismo modo yo acariciaba su pene por encima del pantalón. Después de un rato el sujeto quería tocarme por debajo de la ropa, así que de inmediato me bajé los pantalones mostrándole lo que llevaba puesto, me acaricio ...

... el trasero las piernas y el pecho, me dijo que mi piel era muy suave y que lo excitaba mucho trató de convencerme de ir a su departamento, pues no le gusta ser observado mientras coge, cosa muy común en ese lugar, yo ya estaba perdiendo la paciencia y quería su pene dentro de mi. Traté de convencerlo de hacerlo en ese momento, incluso le dije que podría correrse dentro de mi ano. Al final no lo logré y él se fue al baño a orinar. Pensé en dejar el lugar, pero a media sala vi a un sujeto con los pantalones abajo masturbándose. Lo pensé sólo por unos segundos y entonces me senté junto a él. Tomé su pene y lo masturbé. A diferencia del otro sujeto éste no hablaba mucho y rápidamente me ordenó mamársela. Me hinqué y me metí su pene en la boca, se estuve mamando por varios minutos, el sujeto era rudo y varias veces trató de meterme su pene hasta la garganta, en medio de todo ello me bajé los pantalones y levanté mi trasero, para ver si alguien más se unía, sólo conseguí que un par de personas me tocaran pero ya estaba satisfecho con un pene en mi boca. El sujeto me levantó y me dijo que fuéramos al baño para que me cogiera. Me subí los pantalones y fui sin decir ni una palabra. Una vez que los dos llegamos nos metimos a un cubículo, saqué un condón de mi cartera y un tubo de lubricante que tenía en el pantalón. Le puse el condón me bajé la tanga, me unté un poco en la entrada del ano y levanté mi trasero a la altura de su pene. Rápidamente trató de meterlo. Ya llevaba mucho tiempo ...