Marcela mi vecina (V): Nuevas vecinas
Fecha: 07/06/2024,
Categorías:
Grandes Series,
Autor: MartinyMarcela, Fuente: CuentoRelatos
... es que me da un poco de miedito porque la tenés enorme...
Se dio vuelta y me la volvió a chupar como loca.
La empecé a tratar de puta otra vez, y ella lejos de ofenderse lo disfrutaba, es como que yo la estaba halagando por tragársela toda, me hacía un oral como los dioses y de repente se detuvo y me dijo Dámela toda.
Se volvió a dar vuelta poniendo el culo en pompa y jugué un rato con su concha antes de hacersela entrar, eso lo aprendí de Nacho quien se la hacía desear así a su mujer, y vaya que los resultados fueron fructíferos, Adriana suplicaba ser cogida, no daba más de lo mojada que estaba y de la desesperación con sus manos la apuntó y se la hizo entrar.
Y ese primer gemido es lo que cuenta, ahí uno sabe si hizo bien las cosas y al parecer sí... Era estrecha, pegaba unos alaridos peores a los de su vecina de al lado que tanto criticó.
Era una rubia muy puta, sus ganas de coger eran infinitas y se la bancaba muy bien. Tenerla en cuatro y sentir el golpeteo de mi cuerpo contra ese culo grande pronto iba a hacerme explotar, la cogí más fuerte y Adri acabó. Fue una expresión fuertisima, es como que necesitaba eso. La noté feliz.
Nos besamos antes de seguir y estábamos más que entregados, es como que no había nadie más en kilómetros a la redonda. Solo éramos ella, la cama y yo.
–Ahora vamos a jugar a que yo soy Carlos tu marido, querés mi putita hermosa?
–Sí amor... Hace de mí lo que quieras.
–A ver... Carlos te come las tetas?
–... a ...
... veces.
Me posé en medio de las dos y las disfruté.
–Carlos te chupa la concha?
–A veces.... Pero vos me la comés demasiado rico.
Se la chupé largo y tendido y tuvo su segundo orgasmo, la rubia se retorció en mi boca y yo no me quería despegar.
Yo quería seguir, tenía batería para rato y cuando se tranquilizó retomamos el jueguito de preguntas y respuestas
–A ver mamita... Su marido se la coje por el orto?
–Mmmm no mi amor... jamás de los jamases, es más creo que no le gusto más como antes, ya ni me desea... además tengo un culo horrible y muy grande... A ningún hombre le gustan las mujeres culonas como yo.
–A mí me fascinas sabés, tenés un orto divino. Se río y ya estaba lista.
Otra vez con un hambre voraz quería pija. Se me subió y de a poco fue cabalgandome, se movía y disfrutaba, era insaciable. Y así seguimos, me pedía que se la entierre toda y así fue, le entró hasta el infinito y fue hermoso, cuando me suplicó que quería lechita caliente en la boquita, la puse en cuatro otra vez, la penetre con furia y cuando me sentí venir se la saqué, se arrodilló y le enchastré la cara con mi semen. Algun disparo fue a darle en el ojo y se río a carcajadas. –No me dejes ciega eh. La escena era digna de una película porno. Que rubia más puta resultó ser la brasilera.
Se limpió, nos despedimos y salí de su departamento mirando para todos lados. Por suerte no había espectadores afuera.
Se nos complicaron los encuentros entre semana porque su hija estaba todo el ...