1. Aprobé el examen a satisfacción


    Fecha: 08/07/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Karlisgime, Fuente: TodoRelatos

    ... me recargo sobre el escritorio y pude sentir claramente como su enorme bulto me rozaba entre las piernas.
    
    No me esperaba que ese profesor tuviera tan tremenda verga, ya es un hombre mayor y yo nunca me lo hubiera imaginado.
    
    Eres muy hermosa y me gustas mucho, me dijo acercándose mas entre mis piernas.
    
    Gracias profesor, apenas atine a decir, yo afloje el cuerpo y me le ofrecí discretamente.
    
    Me empezó a acariciar los senos sobre la blusa, y me puse súper colorada de la vergüenza cuando note que los pezones se me paraban y se me ponían súper duros.
    
    El también lo noto y los empezó a pellizcar y a frotar.
    
    Me empecé a evitar y puse las manos a los lados apoyándome sobre el escritorio, en una clara muestra que se los ofrecía descaradamente.
    
    El profesor tomo más confianza y me desabrocho la blusa, me alzo el brasear y me empezó a chupar los pezones mientras me seguía frotando la verga entre las piernas.
    
    Eso me empezó a evitar más de lo que yo hubiera querido y claramente sentí como se me empezaban a salir los jugos.
    
    El profesor noto como me estaba excitando y sin dejar de chuparme los pezones me metió la mano entre las piernas debajo de la falda, enseguida noto como la pantaleta estaba ya toda mojada y me empezó a meter los dedos y frotándome el clítoris.
    
    Yo no soporte más y me recosté sobre el escritorio abriendo las piernas y ofreciéndole mi sexo.
    
    Enseguida el profesor me quito la pantaleta y alzándome las piernas sobre sus hombros me empezó a ...
    ... chupar el clítoris sin dejar de meterme los dedos.
    
    Sentí claramente como me salían los jugos de la excitación y empecé a jadear y a gemir apretando su cabeza con los muslos y haciendo movimientos eróticos con la pelvis.
    
    Se sacó la verga del pantalón y sin dejar de chuparme los pezones y sin dejar de juguetear con mi clítoris se acercó hacia mí y me puso la verga en la boca.
    
    Yo ya sin prejuicio alguno y dando rienda suelta a mis instintos salvajes debido a la tremenda excitación que sentía, le empecé a chupar la tremenda verdad que se cargaba el profesor, quien se lo hubiera imaginado que estuviera tan bien dotado.
    
    Los jugos se me salía a chorros de lo súper caliente que ya me había puesto, y sin poderme aguantar más, me puse nuevamente frente a él y tomándole la verga me empecé a frotar su enorme cabeza en la entrada de la vagina sintiendo como me excitaba mas y más.
    
    Luego de unos momentos frotándome así ya no pude soportar y abriendo las piernas le ofrecí mi sexo, el enseguida me metió su enorme verga y me empezó a coger violentamente, se notaba que el también ya estaba a punto de explotar.
    
    No sé ustedes, pero a mí me mata una verga grande como esa, además tan gruesa y cabezona que me hacía disfrutar plenamente.
    
    De pronto empecé a jadear y a gemir y empecé a moverme como loca, apretando su hermosa verga con mi vagina, síntoma inequívoco que ya estaba yo al borde del orgasmo.
    
    El profesor me empezó a coger con mucha mayor rapidez tomándome de la cintura y ...